El conseller de Interior de la Generalitat, Joan Saura, hizo un llamamiento esta mañana a la "tranquilidad y la normalidad" en Salt (Girona), en referencia al conflicto de estos últimos días motivado por la supuesta inseguridad ciudadana. Saura, además, pidió de manera muy clara que se separaran los temas de inseguridad con los de convivencia.

"Haríamos un mal favor si agrupáramos los temas de seguridad con los de convivencia", insistió. Saura aseguró que se han reforzado los servicios policiales, que se está hablando con el consistorio y que "la situación se normalizará".

El conseller confirmó que el despliegue policial se mantendrá hasta que haya una situación de normalidad. "Creemos que ayuda a la normalidad, aunque tampoco queremos dar la sensación de que Salt está tomada por la policía". "Pero mientras haya una situación que potencialmente pueda ser conflictiva, la presencia de Mossos será más importante", matizó.

Además, el conseller explicó que en Salt no han aumentado los delitos. Del 1 de enero al 21 de febrero de 2010 el número de delitos registrados en el municipio es el mismo que en el mismo período del año anterior, concretó, a la vez que expuso que el nivel de delincuencia en Salt es similar al de otras ciudades.

El problema son los reincidentes

Para el conseller uno de los principales problemas es el de la multirreincidencia. Según explicó durante la inauguración del parque de Bomberos de Cassà de la Selva (Girona), de las ocho personas multirreincidentes de la zona de Girona, hay cinco que actúan siempre en Salt. "Aquí hay un problema y no es solamente de Salt, pasa en Barcelona también y en toda Catalunya", declaró.

Saura insistió en que "es necesario que se aplique el código penal con contundencia para que las personas multirreincidentes no puedan entrar y salir de la cárcel y sean sancionadas como marca el código".

"Lo que pasa es que no se está aplicando el código penal", aseguró. Según la ley, explicó, una persona que haya sido detenida cuatro veces por un delito tiene que ir a la cárcel, por lo tanto, reclamó que todas aquellas personas que suman catorce, veinte o treinta detenciones, "puedan estar en la cárcel y apartados de la sociedad".