El obispo destaca la "lección" de "canto a la vida" que supone el futuro beato Lolo ante situaciones de dolor

El obispo de Jaén, Ramón del Hoyo, destacó hoy la "lección" que ante situaciones de dolor supone el "canto a la vida" del futuro beato Manuel Lozano Garrido, Lolo, al "encajar su sufrimiento" --vivió 28 años con una parálisis física prácticamente completa-- "desde una perspectiva muy alta, desde su fe".

Al ser preguntado por la aprobación, el pasado miércoles, de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo, Del Hoyo resaltó cómo Lolo "es un canto a la vida, hasta el último instante, desde su silla de ruedas".

En este sentido, hizo referencia a cómo, a pesar de la dependencia que Manuel Lozano Garrido tuvo "para todo" de sus hermanas y de otras personas, continuó con su actividad "encajando su dolor y su sufrimiento desde una perspectiva muy alta".

"Desde su fe, él es alegre y siempre se le ve con una sonrisa en los labios en esa situación. Otros se desesperan o no ven sentido ya a su situación, a su vida, y piden, incluso, terminar. En cambio, él hasta el último instante fue un canto a su vida. Esta es la gran lección que quizás debamos aprender", aseguró.

Esta postura de Lolo ante problemas o situaciones adversas, como puede ser un embarazo no deseado, tiene, según el obispo jiennense una fuente: el Evangelio que aprendió desde niño y en el que se fue formando con "unos fundamentos muy sólidos". "Fue ejemplo de tesón, seguridad y alegría en cualquier circunstancia", zanjó.

Manuel Lozano Garrido será beatificado el próximo 12 de junio en Linares, probablemente en el entorno del Santuario de la Virgen de Linarejos, si bien aún no se ha fijado definitivamente el lugar. Por ello, la Diócesis de Jaén se plantea como objetivo explicar la "figura polifacética" de un hombre, que además de católico, fue escritor y periodista.

Para preparar todos los actos relacionados con esta celebración, el Obispado ha creado una comisión diocesana formada por nueve subcomisiones que se encargarán de distintos aspectos. En concreto, habrá una subcomisión litúrgica, cuya misión será organizar la "gran ceremonia", a la que se sumarán las de protocolo y relaciones públicas, enfermos, juventud, catequesis, enseñanza, parroquias y asociaciones, medios de comunicación y de economía.

"La figura de Lolo es muy relevante en muchos aspectos, sobre todo para la Iglesia, y vamos a buscar todos los apoyos para darla a conocer", indicó Del Hoyo, quien anunció que el encargado de presidir la beatificación será el prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, Ángelo Amato.

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