El consejero de Sanidad del Gobierno de Cantabria, Luis María Truan, y el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, firmaron hoy un convenio de colaboración para iniciar la implantación de la tarjeta inteligente entre los profesionales del ámbito sanitario de la Comunidad, implantación que comenzará en el Hospital Valdecilla.

En el acto, al que también acudieron el director del Servicio Cántabro de Salud (SCS), José María Ostolaza; el director gerente del centro hospitalario, José Luis Bilbao, el director general y responsable de Banca Comercial España del Santander, Enrique García Candelas, y el director territorial de la entidad, Carlos Hazas, entre otros, Botín destacó que esta "herramienta innovadora" va a facilitar "muchas" de las funciones de los profesionales que trabajan en este "gran hospital".

Así, se mostró "encantado" de que la tarjeta se implante de forma pionera en Valdecilla, ya que tanto el Banco Santander como la Fundación Botín "siempre" han mantenido una relación "muy especial" con este centro, apoyando "muchos proyectos". De hecho, Botín subrayó que las aportaciones de la entidad al centro sanitario han superado, en los últimos años, los nueve millones de euros, como el PET (Tomografía por Emisión de Positrones).

Tras recordar que el origen de la tarjeta inteligente está en una colaboración entre el Banco y la Universidad de Cantabria (UC) que se inició hace varios años, el presidente del Santander destacó que es la tarjeta "número uno en el mundo" ya que está implantada en 220 universidades de España, Portugal, Reino Unido, de doce países hispanoamericanos y Estados Unidos. En total, y según dijo, la usan 4 millones de universitarios.

Por su parte, Truan señaló que tarjeta tiene "gran cantidad" de aplicaciones" y que, tras su implantación en Valdecilla, —hospital que en el que "no escatimamos esfuerzos y estamos dotando con últimos avances tecnológicos", apuntó— se irá extendiendo por toda la red de centros hospitalarios y de Atención Primaria, como en el Hospital Tres Mares, que abrirá el próximo 1 de marzo. SERVICIOS

Entre las posibilidades y servicios que incorpora la tarjeta destacan la posibilidad de acreditación de los 8.000 profesionales del SCS en su centro de trabajo, autorizando el uso de ordenadores con diferentes niveles de acceso tanto a las aplicaciones informáticas corporativas (correo electrónico o la intranet), como a la historia clínica electrónica de los pacientes.

Además, permite el acceso a datos de carácter personal, al tiempo que abre el paso a los sistemas de información desde ordenadores personales portátiles o desde el domicilio. Asimismo, ofrece la posibilidad de firmar digitalmente documentos electrónicos (recetas, informes médicos, expedientes administrativos), y la identificación corporativa de los profesionales del SCS.

Con todo ello, con la tarjeta también se podrá realizar un control de acceso a diferentes zonas de los edificios sanitarios y pagos en máquinas expendedoras o zonas de ocio (tarjeta monedero).

La aplicación de esta tarjeta inteligente en el ámbito sanitario permitirá extender sus utilidades no sólo a los profesionales, sino al resto de la población a través de la introducción de datos médicos, pruebas diagnósticas relevantes, acceso a redes sanitarias y uso de la receta electrónica.