A través de un comunicado de prensa el colectivo de trabajadores advirtió de que "es hora de delimitar de manera personal las concretas responsabilidades por sus actos de ambos, contra los que adelantaron que también procederán "ante cuantos organismos nacionales e internacionales sean pertinentes para que se analicen los límites del uso de las facultades que la representación sindical confiere cuando se contaminan sus intereses".

Además, la nota avanza sobre los otros "tres trabajadores" que "de una forma u otra han tenido relación laboral con el centro y que tan activamente han participado" en la denuncia que "la opinión pública conocerá pronto los motivos por los que han actuado".

El personal de Punta Blanca se pronuncia así en bloque por primera vez después del levantamiento del secreto de las actuaciones que pesaba sobre las diligencias que el Juzgado de Instrucción número 4 sigue desde hace un año, cuando la Fiscalía recibió la denuncia del líder de CCOO, sindicato al que ayer se permitió personarse en la causa ocho meses después de presentar un recurso para lograrlo.

La defensa de los trabajadores explicó que ha recurrido tal decisión ante la Audiencia Provincial "no porque temamos esta personación, sino porque consideramos que no debe producirse bajo las siglas de esa organización". "Debieran ser los concretos protagonistas quienes asumieran la responsabilidad personal de esa acusación sin cobijarse en unas siglas que también representan a empleados de este centro".

El comunicado acusaN a Aróstegui y a Valle Inclán de propiciar un "hostigamiento público" contra la plantilla, a la que presenta víctima de una "horrible y denigrante imputación". Igualmente, les acusa de "utilizar, hasta extremos que por respeto a los mismos menores no queremos hacer públicos", a los menores del centro, a los que se considera que se ha hecho un daño "difícilmente cuantificable" en lo que a la labor de rehabilitación y prevención de los mismos se refiere.

Los trabajadores indican que algunos de los testigos que han declarado ya ante el Juzgado "no sólo se han desdicho de lo que en principio mantenían por haber sido privados de un ascenso que creían merecer", sino que "han llegado a afirmar que lo que Moreda y Comisiones habían trasladado a la opinión pública no se correspondía con lo que él había contado".

Literalmente, el testigo protegido que dio pie a la denuncia original declaró a preguntas del Ministerio Fiscal que "por parte Comisiones Obreras se está dando una dimensión a esta situación que no es la que el declarante mencionó a Ramón [Valle Inclán] Moreda", aunque confirmó haber visto en varias ocasiones cómo internos del centro eran atados a sus camas durante horas. En el curso de la instrucción del caso, sobre el que la Fiscalía aún no ha emitido una calificación definitiva, se solicitó que un trabajador del centro declarase en calidad de imputado por un presunto delito de torturas.