En declaraciones a Europa Press, Conejero indicó que están pendientes de esos resultados, que deberán reflejar durante tres días unos niveles aceptables para que se pueda beber de nuevo ese agua. Por eso, señaló que desde el viernes se están tomando muestras para comprobar esos parámetros que durante estos días han superado el límite máximo de 5,00 UNF establecido en el Real Decreto 140/2003, lo que llevó a la Delegación Provincial de Salud a declarar que el agua que se distribuye a través de la red de abastecimiento de Baños de la Encina es no apta para consumo humano, por lo que se prohibió su consumo directo o para la preparación de alimentos.

El alcalde, que precisó que la población afectada asciende a unas 2.700 personas, señaló que, en cualquier caso, gracias a las dos cisternas colocadas en lo aparcamientos de la carretera de Bailén y del mercadillo no se están registrando mayores problemas y que, de hecho, "la población lo está aceptando bien". Además, destacó la colaboración prestada tanto por el SAS como por la empresa.

La Sociedad Mixta del Agua de Jaén (Somajasa), empresa encargada de la gestión del agua en alta y baja en el Consorcio de El Rumblar, especificó ayer en un comunicado que el agua suministrada a estos vecinos ha dejado temporalmente de ser apta para el consumo humano debido a un aumento de su nivel de turbidez, que ha superado ligeramente los parámetros marcados por el reglamento que establece los criterios sanitarios de calidad del agua para el consumo humano.

Según detalló, la Delegación Provincial de Salud adoptó esta medida, que se está difundiendo en la localidad a través de carteles y que no incluye el corte del suministro puesto que el agua está desaconsejada sólo para su consumo directo y la preparación de alimentos, mientras que la utilización para el resto de usos domésticos —aseo, lavado o limpieza, entre otros— no entraña riesgos para la salud.

Debido a las fuertes lluvias

Somajasa recalcó en ese comunicado que ya está trabajando en el restablecimiento de los niveles habituales de potabilidad que vuelvan a permitir su consumo en este municipio. El problema detectado en Baños de la Encina se ha producido debido a las fuertes lluvias de las últimas semanas, que han incrementado el arrastre de lodo y piedras al pantano de El Rumblar, desde el que se suministra agua a este municipio.

El "inusual" aumento de impurezas en el agua que se tiene que tratar ha motivado que la estación depuradora haya visto superada su capacidad de filtrarlas completamente, lo que ha conllevado el incremento de los niveles de turbidez del agua tratada.

Desde el viernes, día en que se detectaron los primeros indicios de esta pérdida de calidad del agua, Somajasa ha intensificado el trabajo habitual de limpieza de filtros y decantadores y reforzado los protocolos de tratamiento de potabilización del agua en la zona para solucionar esta incidencia en el abastecimiento y poder transmitir a las autoridades sanitarias, tras los análisis pertinentes, el momento en que el agua recupere sus características habituales y estas determinen nuevamente su potabilidad.