Antonio del Castillo, padre de la joven de 17 años muerta supuestamente la noche del 24 al 25 de enero de 2009 en el número 78 de la calle León XIII de Sevilla capital, lamentó hoy que se haya cumplido un año de la detención del ex novio y principal imputado del caso, Miguel Carcaño, porque tantos meses después "estamos prácticamente igual" en lo que a la investigación se refiere y el resto de los imputados, de hecho, han sido excarcelados.

En declaraciones a Europa Press, Antonio del Castillo explicó que la familia de Marta del Castillo asiste "con monotonía" al avance de las diligencias y las maniobras de las defensas de los imputados; el ex novio de la joven, Miguel Carcaño —preso en la cárcel de Morón de la Frontera, su amigo Samuel B.P., el hermano de Carcaño Javier Delgado, la novia de éste, María Gargía, y el menor conocido como 'El Cuco'. De hecho, Samuel, Javier Delgado y su pareja se encuentran en libertad con cargos mientras el menor vive en un piso tutelado.

"Seguimos tirando, intentando rehacer la vida, pero esto no se te va nunca de la cabeza", dijo Antonio del Castillo, para quien "lo más importante", sin lugar a dudas, es encontrar el cadáver de la víctima, que ha sido buscado en el río Guadalquivir, en el Centro de Tratamiento de residuos de Montemarta-Cónica (Alcalá de Guadaíra, Sevilla) y una zanja del municipio aljarafeño de Camas, localidad esta donde residía la entonces pareja sentimental de Miguel Carcaño.

La búsqueda en camas

De hecho, recordó que la familia ha emprendido la búsqueda del cuerpo en Camas por sus propios medios y, en función de la meteorología, esta búsqueda podría ser reanudada la próxima semana.

En cuanto a la efeméride cumplida ayer, cuando se consumó el transcurso de un año de la detención de Miguel Carcaño como principal sospecho del crimen, Antonio del Castillo lamentó que 12 meses después la investigación permanezca "prácticamente igual", censurando así la libertad de la que gozan Samuel, Javier Delgado, su pareja y 'El Cuco.

Por lo demás, reclamó que el Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla y el de Menores enjuicien "al mismo tiempo" tanto a Carcaño, su hermano, la novia de éste y Samuel como al menor, porque "lo que ocurra en un juicio, puede influir en el otro" y la Justicia corre el riesgo de afrontar "contradicciones" en lo que a ambos procedimientos judiciales se refiere. En ese sentido, mostró su temor ante la posibilidad de que "un fallo judicial implique al otro".