Asimismo, según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Baleares en un comunicado, el juez acordó libertad provisional con cargos para los otros tres detenidos a los que hoy tomó declaración, quienes se encontraban en la vivienda en el momento del homicidio. El juez, asimismo, se inhibió al Juzgado de Instrucción número 4, encargado de la investigación.

Luis Rodrigo Q.Q. confesó los hechos ante la Policía Nacional y alegó que la mató por "accidente" tras mantener una discusión con ella en un piso de Palma, desde donde la trasladó en un coche a las cercanías de la urbanización sa Vinyola, en Campos, donde la descuartizó con unas herramientas de su trabajo como albañil y dispersó las partes del cuerpo por el margen de la carretera.

El jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial, Antoni Cerdà, reveló hoy en rueda de prensa que el arrestado ya ha advertido a los agentes policiales que "no van a poder encontrar" la cabeza de la víctima, de 53 años, ya que la podría haber tirado a un contenedor de basuras para impedir que se conozca la causa de su muerte.

De este modo, la Policía Nacional baraja la posibilidad de que la mujer falleciera tras un fuerte golpe cometido por el hombre o bien por estrangulamiento, lo que explicaría la decisión del presunto homicida de hacer desaparecer la cabeza, mientras que el resto del cuerpo lo fue tirando a una zona con vegetación muy amplia. De momento, los agentes policiales han encontrado el tronco, las dos piernas y el brazo izquierdo, así como restos del derecho.

Las otras tres personas que hoy fueron puestas en libertad provisional con cargos, también de origen ecuatoriano, se encontraban en la vivienda en el momento del homicidio y, por tanto, se cree que podrían haber actuado como encubridoras al no haber denunciado el hecho ante la Policía .