Según relata el Ministerio Público en su escrito de acusación, consultado por Europa Press, la acusada se encontraba sobre las 17,30 horas del día 5 de octubre de 2008 en la calle Joaquín Sainz de la Maza, concretamente en las inmediaciones de la puerta de una discoteca.

En ese momento, fue sorprendida por un agente de la Policía Local portando 26 papelinas del psicotrópico MDMA y 13 papelinas de cocaína, "que poseía con la finalidad de transmitirlas a terceras personas consumidores de esta sustancia", así como 112,25 euros "derivados del ilícito comercial al que se dedica".

Por todo ello, la Fiscalía solicita para la acusada tres años y seis meses de prisión por un presunto delito contra la salud pública y el pago de una multa de 200 euros.