Los miembros del Comité, de los sindicatos UGT, Comisiones Obreras y USO, ofrecieron hoy una rueda de prensa en la que denunciaron públicamente que la empresa ha rechazado todas las propuestas del Comité para evitar el despido de las personas afectadas por el ERE.
Entre las medidas presentadas por los representantes sindicales de los trabajadores se encuentran la congelación salarial durante tres años; absorber, mediante una reducción de horas trabajadas, el despido de los trabajadores; presentar una lista de voluntarios para bajas incentivadas; o un estudio de recolocación y asignación de nuevos puestos.
En todos los casos, explicó Martínez, la empresa se ha mostrado "hermética" a sopesar estas salidas que, a juicio del Comité, podrían evitar el despido de los trabajadores. A su juicio, la empresa lo tiene todo "premeditado" a una salida que podría ser el cierre.
Así, dijo, se ha producido una "bajada en picado" de la producción de una empresa que ha llegado a tener más de cien trabajadores y que ha sufrido la "mala gestión" de la nueva dirección desde el año 2005.
Desde el año anterior, además, los terrenos sobre los que se asienta pasaron de ser de propiedad a estar en alquiler, una decisión que los representantes sindicales no entendieron.
En el año 2008, relató, se despidió, con improcedente reconocido por la empresa, a ocho personas, lo que para Martínez fue un "ERE encubierto". En el año 2009, se presentó un expediente de regulación temporal que "no se cumplió" y que, incluso, hizo que "casi se perdiera más dinero".
Entre los puntos que se incumplió de este expediente se encuentra el que "había un compromiso para el mantenimiento del empleo en el año 2010" y, en cambio, ahora se presenta un expediente de regulación para despedir a catorce. Algo que hace ver al Comité que "todo estaba premeditado".
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