El consejero de Gobernación, Luis Pizarro, valoró hoy la posibilidad de que los partidos políticos aborden la negociación sobre los proyectos de Ley de Autonomía Local y de participación de los entes locales en los tributos de la comunidad de manera similar a la que se desarrolló para la reforma del Estatuto de Autonomía, con reuniones bilaterales, y confió en que ambas normas salgan adelante por consenso. Espera que los partidos, que han "reivindicado tanto estas leyes", consigan el objetivo de que sean aprobadas en la Cámara de manera definitiva antes del 30 de junio.

Luis Pizarro mantuvo hoy reuniones bilaterales en la sede de la Consejería de Gobernación con representantes de IULV-CA (Diego Valderas); de PP-A (Antonio Sanz y Esperanza Oña), y de PSOE-A (Manuel Gracia) para analizar el contenido de las leyes locales ante el inminente inicio de su tramitación en el Parlamento.

En rueda de prensa al término de las reuniones, Pizarro puso de manifiesto que Andalucía es una comunidad pionera a la hora de plantear estas iniciativas y que no se debería de contribuir por intereses político a debilitar ese hecho, refiriéndose concretamente al PP. "Los partidos tienen que considerar que estas leyes son también de ellos y todos los alcaldes deben verse reflejadas en ellas", apuntó el consejero, quien confió en que el PP-A tenga en cuenta las opiniones de sus ediles, que desean que estas normas "salgan adelante".

Afirmó que los dos proyectos de ley responden a lo que mandata el Estatuto de Autonomía, con lo que el marco de discusión debe ser sobre los textos que se han remitido a la Cámara. "El Gobierno no va a retirar las leyes", sentenció el consejero en referencia a la petición que le ha hecho el PP en ese sentido.

Agregó que el Parlamento es el que tiene ahora el protagonismo y los acuerdos entre los grupos pueden dar lugar a que se incorporen algunas modificaciones en los textos a través del consenso y el acuerdo al que lleguen. Insistió en que la voluntad del Ejecutivo es "conseguir el máximo y más amplio acuerdo" en la Cámara y dar satisfacción a las demandas de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias a través de mejoras incorporadas en los textos.

Para Luis Pizarro, es correcto el método que le han planteado los grupos políticos sobre reuniones bilaterales entre ellos e incluso a otros niveles si fuera necesario, algo similar a lo que se hizo con la negociación sobre la reforma del Estatuto de Autonomía. Dijo que el Gobierno no tendrán ningún inconveniente en asistir a cuantas reuniones se les convoque con el objetivo de lograr el máximo consenso.

Confió en que sea "verdad" lo que le ha trasladado el PP de que considera que estos proyectos de ley forman parte del bloque institucional y que, por ello, requieren de un amplio consenso. "Me encantaría que fuera así", apuntó. Luis Pizarro recalcó que las dos normas están perfectamente enmarcadas en los compromisos que el Estatuto de Autonomía nos mandataba y que a partir de ahí el Gobierno está abierto a enmendar, consensuar o transaccionar a partir de los acuerdos que alcancen los partidos. "El Gobierno tendrá una posición abierta para facilitar a los grupos esa tarea de consenso, negociación y búsqueda de acuerdo", puntualizó.

"marketing y autobombo"

Por su parte, la portavoz del PP-A en el Parlamento andaluz, Esperanza Oña, consideró hoy que la reunión que el consejero de Gobernación ha mantenido con su formación ha respondido a una "estrategia de marketing y autobombo" de la Junta de Andalucía y del PSOE sobre las leyes locales, ya que, a su juicio, ha estado "absolutamente vacía de contenido".

Oña dijo en rueda de prensa tras su reunión con Pizarro —que ofreció en el Parlamento y no en la sede de la Consejería de Gobernación— que su formación creía que la reunión era para "trabajar e intentar alcanzar un acuerdo", pero que se ha encontrado con un "engaño superlativo" por parte de la Junta. "Se nos ha dicho que las propuestas que queramos plantear lo hagamos vía enmienda en el Parlamento andaluz", agregó.

Asimismo, la diputada 'popular', que consideró que la "insatisfacción" mostrada por la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) sólo ha servido para que la Junta "se ratifique en sus leyes", destacó que Pizarro les dijo "textualmente" que "si tuviera la certeza de que los alcaldes del PSOE no estuvieran de acuerdo con estas leyes las retiraríamos".

El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, aseguró que el consejero de Gobernación se mostró "receptivo y permeable" durante el encuentro desde el punto de vista político. No obstante, destacó que existe otro plano técnico, que es donde radica "la pelea". "Una cosa es la intención y otra la matemática", afirmó.

En declaraciones a los medios tras finalizar la reunión, Valderas, que calificó el encuentro como "intenso", dijo que su formación se ha encontrado con una actitud de "diálogo" por parte del Gobierno andaluz y que éste se ha comprometido a celebrar más reuniones tanto el ámbito parlamentario como fuera de éste, tales como las llevadas a cabo durante la negociación del Estatuto de Autonomía.

El líder de IULV-CA le trasladó a Pizarro su que si no se realizan "reformas amplias" de ambas normativas antes del debate de totalidad, tanto en lo que se refiere al aumento de la financiación como a una mayor autonomía local, su formación presentará un texto alternativo.

Buscar el "mayor nivel posible de acuerdo"

Por su parte, el portavoz del grupo socialista, Manuel Gracia, quiso dejar claro que los socialistas están en disposición de "abordar un proceso de negociación que busca el mayor nivel posible de acuerdo entre las fuerzas políticas y recoger al mayor nivel posible las posiciones de la FAMP". Apostó por un procedimiento de negociación similar al que se llevó a cabo para la reforma del Estatuto de Autonomía, lo que incluye conversaciones bilaterales entre partidos y, en paralelo, con la FAMP.

"He recibido de Luis Pizarro la plena garantía de que el Gobierno tiene la voluntad de que se alcance el acuerdo y que las negociaciones se hagan sobre la base de los textos remitido al Parlamento, con voluntad de incluir ciertas modificaciones", dijo Gracia, quien añadió que su grupo no va a condicionar las conversaciones posteriores a la posición que PP e IULV-CA puedan mantener en el debate de totalidad de las leyes, que da luz verde a su tramitación parlamentaria y que se prevé para el primer Pleno de marzo.

"Hay margen de proximidad si la negociación se atiene al contenido de las leyes y, como telón de fondo, el Estatuto de Autonomía", según manifestó Gracia, quien confió en que el PP-A abandone su actual posición de "total hipocresía desde el punto de vista político". Señaló que los populares no tienen credibilidad para dar lecciones en este terreno, sobre todo, porque en ninguna comunidad en que gobiernan se han planteado textos similares a los andaluces. "El PP tiene que entrar en la senda de la racionalidad y no de oposición de tierra quemada", puntualizó.