El Consell elabora un proyecto de recuperación paisajística de la Real que ampliará en 106 hectáreas la zona protegida

El Consell de Mallorca, en colaboración con otras instituciones como el Govern o el Ayuntamiento de Palma ha puesto en marcha un proyecto de recuperación paisajística del entorno de la Real que ampliará la zona protegida de 27 a 133 hectáreas, lo que suponen 106 hectáreas nuevas que pasarán a estar protegidas.

Para llevar a cabo este proyecto se ha procedido hoy a la firma de un convenio entre los representantes de diferentes instituciones y entidades que participan en él. Así, han firmado el convenio la presidenta del Consell de Mallorca, institución impulsora del proyecto, Francina Armengol; los titulares de las Consellerias de Salud y Consumo y la de Agricultura y Pesca, Vicenç Thomàs y Mercè Amer, respectivamente; y la alcaldesa del Ayuntamiento de Palma, Aina Calvo.

También han suscrito este convenio el presidente de la Fundación Cultural del monasterio de la Real, Josep Amengual; el director de la Red Europea de Entes Locales y Regionales para la Aplicación del Convenio Europeo del Paisaje (RECEP-ENELC), Ricardo Priore; y el arquitecto encargado del proyecto, Enric Batlle.

Uno de los aspectos más importantes de este proyecto es que se van a incorporar 106 hectáreas de zona protegida a través de la tramitación de un decreto ley, que espera aprobarse a lo largo de este año en el Parlament.

Asimismo, el objetivo principal del mismo es la protección, gestión y ordenación del entorno de la zona la Real para conservar su patrimonio y recuperar el paisaje de este lugar histórico y con un sistema agrícola tradicional que en la actualidad se encuentra degradado.

El arquitecto encargado del proyecto señaló durante la firma del convenio que los pilares de esta iniciativa es que se asienta sobre una zona que se pretende dotar de "un corazón agrícola con límites forestales", "un lugar histórico" y "un espacio colectivo".

En este sentido, explicó que la Real es un lugar que posee un sistema agrícola tradicional (que se ampliará a más de 73 hectáreas con un límite forestal de 60 hectáreas más) que se pretende potenciar con la introducción de nuevos sistemas de cultivo y la incorporación de nuevas variedades, así como de recuperar las autóctonas. Para ello, se potenciarán los cultivos de secano y de huerto, además de otros tipos de sistemas de cultivo más novedosos como puede ser el 'slow-food'. También está previsto recuperar los sistemas tradicionales de distribución del agua.

También apuntó que se trata de una zona muy próxima a la ciudad, por lo que se pretende aprovechar las vías de acceso a la misma y facilitar así que se pueda visitar la zona con comodidad y convertirlo en un espacio colectivo en el que puedan realizarse actividades educativas y de ocio.

Armengol indicó que se trata de "un proyecto ambicioso" que quiere "dignificar un espacio único y valioso". La presidenta añadió que uno de los objetivos del Consell es el de la mejora y conservación del paisaje, en aplicación del Convenio Europeo del Paisaje, razón por la que han puesto en marcha esta iniciativa.

La alcaldesa de Palma dijo, por su parte, que el consistorio palmesano está "a disposición" del Consell para lograr que este proyecto sea una realidad y comentó que, aunque han "atravesado momentos de dificultad" en su elaboración, han logrado llegar a la firma del convenio "en consenso y diálogo".

Thomàs subrayó que hoy es "un día en que todos deben estar contentos" porque este trabajo es "fruto" del consenso alcanzado entre todas las instituciones implicadas. El conseller agregó que al inicio de la legislatura se tomó la decisión de continuar con el proyecto del hospital de Son Espases pero con el compromiso de modificarlo para intentar incorporar medidas medioambientales.

Así, apuntó que este proyecto incorpora algunas de estas medidas como puede ser la creación de una duna, donde se plantarán diversas variedades de árboles, que tapará parte del hospital y de su aparcamiento, de manera que disminuirá o eliminará la visión del mismo desde la Real.

Amer afirmó, por su lado, que la Conselleria de Agricultura participa en este convenio por tres motivos, como son la elaboración de un contrato agrario territorial que pretende producir alimentos a la vez que se conserva el paisaje, porque colaboran sesenta explotaciones agrarias que tratan de conservar las variedades locales y porque se hace una importante apuesta por la recuperación de los sistemas tradicionales de regadío.

Armengol señaló que el presupuesto para llevar a cabo este proyecto no está todavía cerrado, porque conlleva algunas dificultades como la inclusión en el mismo de terrenos privados, pero apuntó que habrá dinero público para hacerlo una realidad y subrayó la implicación en este tema de las diferentes instituciones.

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