El trabajo previo a la intervención comenzó a finales de 2008 con el realojo de las 18 familias que aún convivían en el edificio y que fueron trasladadas a otros inmuebles en régimen de arrendamiento propiedad de la administración autonómica en el mismo barrio de Arrayanes. Un trabajo, tutelado por siete trabajadores sociales contratados por la Junta, que ha contado con la aprobación de los vecinos.

El consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, y el alcalde de Linares, Juan Fernández, visitaron hoy el edificio que ha sido objeto de una renovación integral que ha incluido la mejora de las redes de agua y luz, el arreglo de los saneamientos, la reparación de fachada y cubiertas, el adecentamiento de las zonas comunes, la sustitución de carpinterías metálicas de aluminio exterior y de puertas y cerrajerías de acero existentes, además de la adaptación de sus dos ascensores a la normativa vigente, según detalló en un comunicado la Junta.

Paralelamente a esta reforma, el equipo de siete trabajadores sociales de la Junta lleva a cabo un programa de intervención social en la barriada no sólo para mejorar los edificios de la barriada, sino para integrar también a la población, comprometiendo a todos los colectivos en el mantenimiento y conservación de sus inmuebles e impidiendo a la vez situaciones de marginalidad y problemas de convivencia en el barrio.

Junto a la reforma de la Torre Quinta, la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio va a subvencionar la instalación de ascensores en otros 25 bloques de la barriada de Arrayanes, con un presupuesto de 2,7 millones de euros. En el municipio de Linares, han sido 1.000 familias las beneficiarias de las actuaciones de mejora residencial impulsadas por la Junta durante 2009, con una inversión de 4,5 millones.