Según el síndic, el pacto es la fórmula que los araneses han empleado a lo largo de la historia para preservar sus derechos colectivos y reiteró que Aran "no aceptará cualquier ley", ante lo que afirmó que "las prisas no son buenas consejeras".

El síndic afirmó que la propuesta de la oposición para presentar una iniciativa legislativa comarcal sobre la Ley de Aran es "unilateral, imprudente e incoherente".

"Es una huída hacia delante que ignora el espíritu pactista de los araneses y rompe el consenso tanto con las fuerzas políticas aranesas como con la Generalitat, con quien se había acordado un procedimiento concertado para aprobar la ley", remarcó.

Sostuvo que es el Gobierno catalán quien "acaba garantizando los recursos y la financiación para desplegar el autogobierno".

Francés Boya mostró su sorpresa al constatar que "Convergència confunde Val d'Aran con La Cerdanya", que usó el mismo procedimiento para reivindicar un régimen especial, parecido al de Aran.

También aseguró que "la oposición es incoherente pidiendo el desbloqueo de la Ley, porque Covergència bloqueó durante diez años la primera Ley de Aran" que permitió la reinstauración del autogobierno.