Camps, que hoy asistió al acto de inauguración de Fitur 2010, presidido por Sus Majestades los Reyes, insistió en la inversión en infraestructuras turísticas y el apoyo a todo el sector, en concreto, a la mejora de la profesionalización en las pymes, que repercute en la imagen de la Comunitat como "territorio atractivo" para cualquier turista que venga a España y, en este caso, a la Comunitat Valenciana.

Asimismo, destacó el papel relevante del turismo como vehículo para dar "vender nuestras tradiciones, nuestras fiestas, nuestros productos o gastronomía" y lo calificó como "un camino para vender la imagen e identidad de todo un pueblo".

Se trata, dijo, "de un camino esencial para el futuro de la Comunitat Valenciana porque son millones los visitantes que vienen a la región a lo largo de todo el año" porque tienen en esta autonomía una "referencia constante y permanente de fidelidad de un territorio amable y con todas las posibilidades abiertas".

Además, resaltó la apuesta por hacer de la Comunitat una oferta constante y permanente de turismo en España, a través de la diversidad de la oferta, con municipios, turismo de interior y de litoral, de ocio y deporte, de congresos o gastronómico.

En torno a la una del mediodía, el jefe del Consell inició su recorrido por los pasillos del pabellón dedicado a la región, que cuenta con 10.500 metros cuadrados brutos, teniendo en cuenta los pasillos de la feria, que se integrarán dentro del pabellón de la Comunitat.

En este certamen, que se celebra hasta el próximo domingo, la Comunitat Valenciana presenta toda su oferta turística de manera que más de 130 entidades están representadas en el pabellón 5, incluyendo 92 municipios, siete mancomunidades y 33 organismos, además de contar con la presencia de las cuatro marcas turísticas de la Comunidad: Castelló Costa Azahar, Costa Blanca, Benidorm y Valencia Tierra y Mar.

En su visita, Camps, acompañado de las conselleras de Turismo y Agricultura, Belén Juste y Maritina Hernández, y la presidenta de las Corts Valencianas, Milagrosa Martínez, se paró a contemplar, detenidamente, la mayor parte de los stand de la Comunitat. Entre ellos, destacan, por su originalidad, el dedicado a Benidorm, decorado por completo con colchonetas de piscina de múltiples colores, y el centrado en promover Alicante 2011, en el que los asistentes pueden incluso jugar con barcos.

Asimismo, en el pabellón de la Comunitat Valenciana, están también presentes los tradicionales helados de turrón de Jijona, que consiguieron crear ya algunas colas de asistentes para poder degustarlos, en las primeras horas de la mañana, y un artista encargado de pintar un Ninot que estará terminado en la última de las jornadas de Fitur.

Detalles valencianos

En el stand, un cocinero explica cómo hacer un buen arroz, mientras lo prepara en sus fogones para, acto seguido, ofrecérselo al público, que se coloca en fila para poder degustar el fruto de sus lecciones. Además, en los pasillos del pabellón de la región se pueden apreciar detalles muy valencianos como los naranjos, que decoran el recorrido al visitante, y la luz y el agua, ya que toda la escenografía de la Comunitat contiene tonalidades blancas y azules.

También cuenta con un espacio dedicado a los grandes proyectos y eventos, como la Copa América, Aeropuerto de Castellón, Ciudad de la Luz, Ciudad de las Artes y las Ciencias, Comunitat Valenciana Masters Castellón-Costa Azahar, Circuito de Fórmula 1, Palau de les Arts, Volvo Ocean Race, Open de Tenis, el circuito Ricardo Tormo de Cheste, la Global Champions Tour y la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana (SPTCV).

El turismo constituye uno de los pilares básicos de la economía valenciana ya que aporta el 13 por ciento del PIB de la Comunitat y genera el 12,8 por ciento del total del empleo, con un total de 300.000 puestos de trabajo.