Aun así, alrededor de 6.500 alumnos no han acudido a clase, 5.400 de ellos en la localidad de Alzira, donde se decretó la suspensión de las clases para los días de ayer y hoy, y el resto por diversos desperfectos causados por el vendaval.

Así, durante el día de hoy se continúa trabajando para solucionar algunos de los daños provocados por las rachas de viento, lo que ha impedido a algunos niños ir a sus aulas. Es el caso de un centro de Gandia (Valencia) donde se están arreglando las aulas prefabricadas o en un colegio de Quart de Poblet (Valencia) en el que cayeron árboles que aún no han podido ser retirados, detallaron a Europa Press fuentes de la Conselleria de Educación.

También los alumnos de tercero a sexto a Primaria de un colegio de la Vall d'Uixò (Castellón) se han quedado en casa porque ayer cayó una parte de la claraboya del módulo en el que estudian.

A todo ello hay que sumar que en un colegio de Cocentaina (Alicante) se han suspendido hoy las clases por la caída de árboles en el recinto.