El Ayuntamiento de Valladolid dio en la mañana de hoy la orden de cerrar el parque del Campo Grande a los peatones ante el posible riesgo de la caída de árboles a causa de las fuertes rachas de viento que azotan la ciudad desde la pasada madrugada.

Según informó el alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, en declaraciones recogidas por Europa Press la decisión se tomó como precaución "no vaya a ser que se caiga uno justo en el momento que pasa una persona por debajo".

El regidor explicó que ya hubo otras ocasiones en las que se cayeron árboles en el céntrico parque vallisoletano y en el de Las Moreras y añadió que los servicios de Parques y Jardines, la Policía Local y los Bomberos, que están "movilizados desde las seis de la mañana", atienden en primer lugar las zonas en las que hay tráfico rodado y después entrarán al Campo Grande.

En este sentido, el primer edil informó que el Paseo de Isabel la Católica se abrió al tráfico en torno a las 12.00 horas, ya que sobre las 6.00 horas de hoy la caída de varios árboles de gran tamaño en Isabel la Católica, a la altura de la iglesia San Agustín, obligó a cortar al tráfico los dos carriles en sentido al paseo de Zorrilla.

León de la Riva, quien reconoció que no le constaba aviso alguno de Protección Civil por la llegada de estos vientos, explicó que en el caso de estos árboles su recuperación es "difícil" por su envergadura y su edad por lo que lamentó que haya tenido que "entrar la motosierra".

El alcalde especificó que las caídas se han debido, en el caso de estas coníferas de Las Moreras, a que por su mayor volumen ofrecen más resistencia al árbol, a lo que añadió que "ayer estuvo lloviendo todo el día, con lo cuál la tierra estaba muy blanda, y que las raíces están altas porque no tienen que bajar mucho para buscar la humedad".

Asimismo, el viento provocó el derribo de árboles en otros puntos de la capital vallisoletana como las calles Doctor Villacián, Mariano García Abril, Joaquín María Jalón, Simón de Colonia, Calixto Valverde, Costa Brava, Antonio Royo Villanova y Uruguay así como en las plazas México y Everest.

Además de la caída de árboles, el fuerte viento provocó el desplazamiento de numerosos contenedores de basura que se encontraban vacíos ya que cuando comenzó el temporal de aire ya habían sido vaciados.

León de la Riva confirmó que estas "contingencias totalmente imprevisibles" se han resuelto "de forma rápida" y que no se produjo desgracia personal alguna. No obstante, sí que hubo daños materiales en farolas, señales de tráfico e incluso algún vehículo estacionado que fue golpeado por árboles y ramas.