En este sentido, Blanco aseveró que con las condiciones meteorológicas adversas es "imposible cuantificar daños", por lo que "poco a poco" las máquinas y camiones del Infoca, junto con técnicos y agentes de la Guardia Civil trabajan por retomar de nuevo la normalidad.

En concreto, los trabajos se centran "sobre todo" en los domicilios de Valderrubio damnificados por el lodo que también se esparce por las calles, y "es más, todavía no se ha podido observar nada de lo ocasionado en la agricultura, por lo que se tardará tiempo en cuantificar", lamentó la alcaldesa, quien admitió que mañana se podrían dar cifras aproximadas sobre daños causados en los inmuebles.

Hasta esta pedanía también se han desplazado operarios de los municipios cercanos y la Guardia Civil, así como técnicos de la Diputación de Granada y de la Junta de Andalucía. Todos ellos trabajan en despejar las calles con la ayuda de camiones y excavadoras y se afanan en vaciar el agua de las viviendas afectadas, que "desgraciadamente son la mayoría".

Ante ello, el anejo de Valderrubio solicitará ser declarada zona catastrófica para obtener ayudas que le permitan arreglar las 600 viviendas dañadas a causa del temporal de viento y nieve que azota la provincia granadina. De hecho, las continuas crecidas del arroyo de Escóznar obligaron el viernes al desalojo de la guardería de la localidad, donde había atrapados 16 niños, y a la evacuación de los escolares y profesores del colegio público, informaron fuentes de la Guardia Civil.

Además, el municipio permaneció el viernes incomunicado parte del día a causa de la crecida del arroyo, que inundó calles, carreteras y viviendas, incluida la de una mujer de 76 años que falleció a causa de este suceso y que fue enterrada ayer.

El Ayuntamiento de Valderrubio ha habilitado una oficina para atender las demandas de los ciudadanos, ya que la intención de la alcaldesa es buscar el asesoramiento y apoyo de la Junta y la Subdelegación del Gobierno para conseguir la declaración de zona catastrófica.