Así, según dicho decálogo, UCE-Andalucía cree "muy conveniente comprobar en los establecimientos los artículos y sus precios", recomienda realizar una lista de lo que se necesita o se desea adquirir "para evitar comprar de manera impulsiva; en las prendas de vestir hay que comprobar la talla, la composición y las instrucciones de lavado y planchado y en los productos perecederos, no hay que olvidar mirar la fecha de caducidad o consumo preferente.

UCE-A reconoció que los comerciantes "no tienen la obligación de devolver ningún artículo a no ser que éste esté defectuoso, pero si durante el año un establecimiento anuncia que admite devoluciones, tendrá que aceptarlas también en época de rebajas salvo que señale expresamente lo contrario", aconsejó "preguntar al encargado del local si las devoluciones se cambian por dinero, por la entrega de otro producto o por vales" y advirtió de que el producto adquirido antes de las rebajas y devuelto en este periodo "puede ser una trampa, pues los establecimientos tienen la obligación de rembolsar el precio que el artículo tenía cuando fue comprado".

Asimismo, apuntó que cuando un establecimiento luce el distintivo de que acepta pago con tarjeta, "debe aceptarlo siempre, salvo que se indique de forma visible que queda excluido en época de rebajas", recordó que los comerciantes "no pueden anular la garantía de un producto con la excusa de que está rebajado", así como que la etiqueta debe contener el precio anterior a las rebajas y el precio rebajado.

Por último, la Unión de Consumidores recomendó a los usuarios que "no olviden exigir y guardar el ticket de compra por si surge algún problema e incluso deben conservar la publicidad, ya que tiene valor contractual".