La Delegación de Convivencia y Seguridad del Ayuntamiento de Sevilla ha establecido un dispositivo, similar al protocolo de actuación establecido para el control y erradicación de asentamientos, con la finalidad de desalojar hoy a los indigentes que actualmente permanecen en el interior y las inmediaciones de las Naves del Barranco, cuya ocupación por los 'sin techo' ha sido denunciada por vecinos de las inmediaciones.

Fuentes municipales precisaron a Europa Press que este dispositivo, que contará con la presencia de los servicios de Policía Local, el Centro de Coordinación Operativa (Cecop) Social y la empresa municipal de limpieza (Lipasam), tendrá la finalidad de proceder a la limpieza de la zona trasera de las naves, donde distintas personas pernoctan. Al mismo tiempo, se les informará de la prohibición de estar en el lugar y se pondrá a su disposición los recursos sociales municipales existentes, si así lo desean.

La actuación se lleva a cabo con carácter de urgencia por el hecho de que el cortejo de la Cabalgata de Reyes Magos de 2010 tiene previsto su paso por las inmediaciones, según añadieron las fuentes consultadas.

Los vecinos del entorno de Plaza de Armas criticaron la ocupación del edificio, llevada a cabo por indigentes durante las festividades navideñas. La presidenta de la asociación de vecinos 'Estación de Córdoba', Dolores Dávila, explicó a Europa Press que los moradores del entorno ya han denunciado varias veces ante organismos como la Junta Local de Seguridad, la Junta Municipal del Distrito Casco Antiguo o el servicio de emergencias 112 la existencia de personas 'sin techo' habitando en los soportales techados del edificio, algunas de las cuales, añadió, cobran entrada con ademanes agresivos a los otros.

No obstante, estos días han observado cómo "han logrado forzar la puerta y meterse dentro, con colchones y cartones", por lo que llamaron a la Policía Nacional, "que nos confirmó que legalmente no podían hacer nada, pues al no tener uso, ser público y no estar establecido como residencial no se considera ocupación ilegal".

"Es muy fuerte", recalcó Dávila, que incidió en que el exterior acristalado de las naves permite ver lo que ocurre en su interior, motivo por el cual los propios indigentes, a su juicio, "habrán decidido entrar por el mal tiempo y la falta de uso de un edificio abandonado".

Añadió que, dado que la cartelería que anuncia la instalación de un Centro de Información Turística sigue en el inmueble, a pesar de que ya no cuenta con ese uso, "la gente sigue viniendo, y nos hemos encontrado hasta con turistas haciendo fotos".