De momento, se harán dos batidas en la Pata del Caballo, Coto Nacional, y paraje de Interés Comunitario ubicado en la Sierra de Huelva, según ecologistas y cazadores.

Egmasa, empresa dependiente de la Consejería encargada de organizarlo, ha explicado en la zona que quiere evitar que los animales se coman los brotes de los árboles recién plantados.

¿Por qué no intentar trasladarlos? Medio Ambiente responde a 20 minutos que se trata de «batidas selectivas» de especies que no estén en peligro de extinción. Argumenta que es la mejor forma de controlar la población de ciervos, ya que «si no se hiciese, no se regeneraría la zona y los animales morirían de igual manera».

J. Romero, de Ecologistas en Acción, lo define como «una barbaridad» que contradice la Ley de Flora y Fauna, que regula la caza.

Conflicto

La primera montería se convocó para este domingo. Se ha aplazado porque la empresa pública Egmasa quiere financiarla y, a cambio, quedarse con la carne y los trofeos. Pero en la sociedad Pata del Caballo, que gestiona el Coto, no están de acuerdo.

Lobos en lugar de balas

Ecologistas cree que las balas podrían dejarse a un lado introduciendo, con control, en algunas zonas, ejemplares de lobo ibérico, como en fincas públicas. El lobo se encargaría de forma natural de ser el controlador de los ciervos. Además, ayudaría a repoblar el lobo ibérico, que está prácticamente desaparecido en Andalucía. Por otra parte, la Consejería de Medio Ambiente aseguró ayer que el Plan de Reforestación de toda la zona quemada comenzará en un año si llueve lo suficiente.