Ocho años después de que la invasión liderada por Estados Unidos expulsara del poder a los talibanes en Afganistán, este país devastado por la guerra se ha convertido en el lugar más peligroso del mundo para nacer, según un informe publicado por Naciones Unidas con motivo de la celebración del Día Internacional de los Derechos de la Infancia.

Afganistán es especialmente peligroso para las niñas, según recoge el informe anual El estado de los niños del mundo, elaborado por UNICEF. No en vano, el país asiático cuenta con el mayor índice de mortalidad infantil de todo el mundo (257 muertes por cada mil nacidos) y el 70% de la población no tiene acceso al agua potable, según ese mismo informe.

Además, a medida que los insurgentes talibanes aumentan su presencia a lo largo del país crece la inseguridad y se hace difícil llevar a cabo la campaña de vacunación contra la polio, una enfermedad que continúa siendo endémica en el país, y contra el sarampión, una amenaza para la vida de los menores.

310 colegios atacados

"Afganistán es, sin duda, el lugar más peligroso para nacer", según declaró en una rueda de prensa en Ginebra Daniel Toole, director regional de UNICEF para Asia Meridional.

Alrededor del 43% del país está fuera del alcance de los organismos de ayuda debido a su inseguridad, según Toole, que subraya que ha descendido el número de niños que asisten a la escuela, "en particular de niñas", apunta.

Más de 310 colegios afganos fueron atacados el pasado año, dejando un balance de 124 muertos y 290 heridos.