«A fin de cuentas es parte de nuestra historia». «Creo que hay cosas más importantes que  quitar el nombre a calles porque sean de la época franquista. A fin de cuentas es parte de nuestra historia, aunque ésta no sea muy agradable. En cualquier caso, si el Ayuntamiento de Murcia decide quitarlas estaría de acuerdo, pero no es algo imprescindible».

Estrella García. Auxiliar de clÍnica

«Nos tienen que respetar como nosotros a ellos». «La historia hay que recordarla aunque les moleste a éstos que nos quieren quitar estatuas simplemente porque no les gustan. Igual que nosotros estamos respetando las medidas que están intentando llevar a cabo, nos tienen que respetar los nombres de calles franquistas que hay en Murcia».

Ángel Sánchez. Comercial

«Las cambiaría por nombres de deportistas». «Hay que quitar los nombres de esas calles. Se tienen que modernizar. En mi opinión, las cambiaría por nombres de deportistas olímpicos que merecen más la pena que los nombres de generales. Por ejemplo, a las calles les pondría nombres como avenida de Miguel Indurain o avenida de Mariano Rojas».

Juan F. Cabrera. Camarero

«Los que se preocupan por quitarlas son ignorantes». «Yo sí quitaría los nombres franquistas de las calles, pero no me parece algo importante para la ciudad. Eso sí, no soy ni de izquierdas ni de derechas, pero creo que es parte de nuestra historia. La gente que quiera polemizar y se empeña en quitarlas son simples ignorantes».

Víctor Gutiérrez. Diseñador gráfico

«A la gente le preocupa más que arreglen las aceras». «Me es indiferente si cambian o no de nombre las calles. Creo que, en general, la gente pasa bastante de la polémica que se ha creado, por ejemplo, en Madrid con la estatua de Franco. Aquí, a la gente le preocupa más que le arreglen las aceras y es bastante neutral en estos temas».

Lidia Martínez. Dietista

«Los que quieren cambiarlas son extremistas». «Me da igual si cambian los nombres. La verdad es que deben hacer muchas más cosas en la ciudad antes que preocuparse por esto. En definitiva, se trata de otra época y a la gente le debe dar igual. En mi opinión, quien se empeña en cambiarlas me parece demasiado extremista».