Juan Diego Botto interpreta a Leonardo Da Vinci en el videojuego Assassin's Creeed II, una aventura de acción ambientada en el Renacimiento en la que el histórico personaje es el mejor amigo del protagonista. El actor ha hablado para 20minutos.es sobre la experiencia.

¿Le gustan los videojuegos o le resultan un poco ajenos?
Es un asunto que me pilla de lejos. He jugado al Tetris, los marcianitos y poco más. Ese es uno de los motivos por los que me apetecía hacer este trabajo, quería vincularme a un mundo que ya no se puede ignorar.

¿Cuáles fueron las otras motivaciones que le llevaron a aceptar el trabajo?

Sinceramente, al principio no me llamaba mucho la atención, estaba un poco reticente. Fue mi hermana la que me dijo: "Tienes que hacerlo, ese juego es la hostia". Me enseñó el primero y me animé a hacerlo.

¿Alguna vez ha realizado doblaje de animación?

No. Hasta ahora, en doblaje sólo me había doblado a mí mismo.

¿Cómo ha sido la experiencia?

Muy buena. Es muy divertido, tienes mucha libertad para buscar un registro de voz, entonar... Es como inventarte un personaje.

¿Le dieron alguna instrucción a la hora de interpretar?

Había algunas directrices. En el juego, el personaje pasa por varias etapas de su vida y hay que amoldarse a eso. Al principio es un Da Vinci joven, muy creativo y disperso, después aparece como una persona más mayor, más centrada.

¿Repetiría la experiencia?

Sin duda. Me gustaría hacer algo de animación alguna vez. Hay mucha exigencia para que todo salga bien, pero es divertido.

¿Le gusta el personaje de Da Vinci?

Mucho, me ha encantado encarnarlo aunque sólo sea de voz. Desde hace mucho tiempo tengo un libro en el que aparecen las máquinas de Leonardo Da Vinci, que siempre me han llamado mucho la atención. Es un personaje muy interesante, el arquetipo del hombre renacentista.

¿Cuál es el papel de Da Vinci en el videojuego?

Leonardo es muy amigo de Ezio, el héroe del juego. Le ayuda en multitud de ocasiones, es un personaje fundamental para ir avanzando y resolviendo los enigmas de la aventura.

¿Qué otros personajes históricos le gustaría interpretar, ya sea en el cine o en cualquier otro medio?

Muchísimos. Desde Sócrates hasta el miliciano de la foto de Franz Capa.

¿Qué es lo que más le ha impresionado de Assassin's Creed II?

Tengo que reconocer que lo que me impresiona es por desconocimiento. Lo primero que me pareció alucinante fue la ciudad de Venecia. Está muy bien hecha, todos los edificios, los canales, los pequeños detalles... También la física, el peso de las cosas, cómo se mueven. Además, me gustó la amplitud de posibilidades que tiene el jugador. No es nada lineal, es como si fuera una película en la que puedes elegir cómo hacer las cosas.

¿Fue muy duro el proceso de doblaje?, ¿cuánto tiempo tardó en realizarlo?

Para mí fue muy rápido. Cuando me embarqué en el proyecto todo fue fugaz. Yo concluí mi parte en una semana, se me hizo muy corto, aunque los profesionales del doblaje suelen hacer el mismo trabajo en un día.

¿Cómo ve ahora la industria del videojuego?

Creo que es una industria enorme, que cada vez tiene mayor importancia y que está muy relacionada con el cine, no sólo en cosas como el doblaje realizado por actores sino en temas como los efectos especiales, que los hace la misma gente. No hay que ver el cine y los videojuegos como mundos enfrentados sino como universos que se pueden complementar.