Unas obras municipales de reforma en el barrio de La Chanca de la capital de Almería han dejado al descubierto los restos de un cadáver que se encontraba bajo el suelo de una vivienda en el número 2 de la calle Francisco Aguilera y que, según las primeras hipótesis, podría haber sido enterrado hace más de medio siglo debido al estado en el que se encontraban los huesos.

Así lo indicó un portavoz de la Comisaría de Policía Nacional de Almería, quien explicó que en la mañana del miércoles se recibió una llamada por parte del arquitecto de obra municipal del Ayuntamiento de Almería en la que informaba del hallazgo de restos humanos por parte de los operarios, por lo que hasta el lugar se desplazó una dotación policial.

De esta forma, los trabajadores, que preparaban la demolición de varias casas abandonadas para restaurar el terreno municipal, encontraron los restos cuando perforaban el suelo con un martillo hidráulico.

Según los primeros datos aportados por los investigadores, se trata de restos "muy antiguos" que se encontraban en contacto directo con la tierra, por lo que, debido al paso del tiempo, tan sólo encontraron de forma diseccionada las partes óseas "más fuertes" como el cráneo, la columna vertebral o los fémures acompañados de una gran cantidad de polvo sin que se hallaran restos de piel, cabello o sangre.