La policía francesa detuvo el lunes a cuatro personas en una nueva redada contra presuntos islamistas radicales, tras el procesamiento y encarcelamiento la semana pasada de cuatro sospechosos de preparar atentados en París.

"Es el seguimiento de la misma investigación, es la misma red", aseguró el ministro galo del Interior, Nicolas Sarkozy, en la emisora de radio "RTL", minutos después de que se conociera la operación.

Los agentes de la Dirección de la Vigilancia del Territorio (DST) tenían dos objetivos principales, dos franceses convertidos al Islam, de entre 25 y 30 años, que mantenían relaciones con Safé Bourada, el presunto cabecilla del grupo desarticulado el pasado lunes.

Bourada, de 35 años, fue procesado el pasado viernes junto a otros tres hombres por asociación de malhechores con fines terroristas y por financiación de terrorismo.

Estos cuatro imputados formaban parte de las nueve personas detenidas en la región parisiense el pasado lunes a las afueras de París y en el noroeste de Francia. Posteriormente cinco de ellas fueron liberadas sin cargos.

Uno de los liberados, así como otro presunto miembro de la célula detenido en Argelia el pasado día 9, habían indicado que el grupo planeaba atentados contra el metro de París, la sede de la DST y el aeropuerto parisiense de Orly.

La célula desarticulada está supuestamente ligada al Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC) -rama escindida del argelino Grupo Islámico Armado (GIA)-, que ha designado a Francia como su "enemigo número uno", en un reciente comunicado firmado por su jefe y difundido en internet.

Anteriormente, el GSPC había amenazado a Francia por su apoyo al Gobierno argelino, su participación en acciones antiterroristas en Afganistán y su legislación que prohíbe el velo islámico en las escuelas públicas.

"Son investigaciones largas ya que, desde hace meses o incluso años, un cierto número de individuos son vigilados y, en el momento en que los servicios especializados lo consideran necesario, se producen los arrestos", explicó hoy el titular de Interior.

Bourada, condenado a diez años de prisión por su participación en los atentados perpetrados por el GIA en el metro de París en 1995, salió de la cárcel en febrero de 2003 y fue vigilado desde entonces por los servicios de información de la policía.

Dos de los detenidos hoy, que conocían a Bourada, habían cumplido penas de prisión por delitos comunes. Los otros dos son una pareja que estaba en el domicilio de uno de ellos, precisaron fuentes próximas a la investigación.

La Policía continúa con los registros y está previsto que los sospechosos sean llevados a los locales de la DST durante el día para ser interrogados.