En los últimos 7 meses el número de usuarias de este método en la provincia se ha incrementado en un 40%, mientras que en Andalucía ha crecido un 26%, según los datos de ventas de este anticonceptivo.

¿Cómo funciona?

Es un tratamiento hormonal que evita la fecundación, con el mismo sistema y efectividad (99%) que la píldora. No previene enfermedades de transmisión sexual, por lo que lo suelen utilizar mujeres con pareja estable. Es un círculo flexible que se introduce en la vagina durante 3 semanas. Se dispensa con receta y cuesta 12 euros.

No se mueve, no se nota, no molesta

El número de usuarias en la capital dobla a las de las zonas rurales. Por edades, las menores de 30 años son las que más lo utilizan, aunque no depende de los años sino que  «está en virtud del conocimiento que cada mujer tenga de su cuerpo», afirma la Dra. García Piñero. Las ventajas son muchas: los efectos secundarios son menores que en las pastillas, ni molesta ni se nota durante las relaciones sexuales, y no se corre el riesgo de olvidar el tratamiento, como con la píldora.