El distrito barcelonés de Ciutat Vella prevé autorizar el ejercicio de la prostitución en el interior de los pisos. Ahora mismo está modificando su Plan de Usos para que esta actividad pase del espacio público al privado.

La concejala del distrito, Itziar González, calcula que los cambios legales se habrán aprobado entre diciembre y enero. Gracias a ellos, «toda o casi toda» la prostitución desaparecerá de la calle. Ciutat Vella no tiene ningún prostíbulo o burdel. Ahora, la ordenanza lo impide porque hace falta respetar las distancias con los equipamientos.

«Buscaremos la manera para que» la prostitución se pueda ejercer en los pisos «en condiciones y sin molestar los vecinos», matiza González. La lucha contra la prostitución en la calle pasa por «investigar qué negocios, redes o locales promueven el enquistamiento del problema». El Ayuntamiento asegura que ahora no se ha reforzado la seguridad en torno al Mercado de la Boquería, sino que se han «redistribuido los agentes».

Además, l’ayuntamiento estudia como cerrar el popular mercado barcelonés por la noche, segundos piden los tenderos. El consistorio quiere desvincularlo de la prostitución.

L’alcaldes de Barcelona, Jordi Heredero, quiere que el PSC incluya en el programa de las elecciones del 2010 la regulación de la prostitución. D’otra banda, la delincuencia por la prostitución ha «bajado notablemente» en Gavà y Castelldefels por el cierre de burdeles, según la Fiscalía.