¿Qué esconde el éxito de 100 Montaditos?

Quizá en tu grupo de amigos o entre tu familia se denomine el ‘cienmon’ o el ‘montaditos’. Cómo se conoce entre los tuyos es lo de menos, pero apostamos a que has quedado allí más de una vez a aprovechar la Euromanía –ya sabes, cuando toda la carta (o casi toda) está a un euro y lo das todo- o a brindar con la Jarramanía los jueves para celebrar que el fin de semana está más cerca.

100 Montaditos es todo un referente para gran parte de los españoles y, especialmente, todo un icono millennial, aunque ha conseguido colarse en el corazón de personas de todas las edades. Es el lugar que recomiendas a tu amigo extranjero para vivir la experiencia ‘real Spanish’; aquel que te ha visto crecer en tus años de universidad; el que siempre te ha acogido para una cena, una quedada o una cita, disfrutando de buen producto, incluso si tu presupuesto era más bien reducido.

Es una realidad: todos, todas nos hemos montado más de un plan en 100 Montaditos. Conocemos perfectamente ese aviso por megafonía que marcó los inicios de la marca y puede que hasta hayas sido de aquellos que se ponían un nombre falso para hacer la gracia. Se ha convertido, con el paso de los años, en un lugar en el que encontrar a familias con niños, a grupos de amigos de la Generación Z, a mayores que se reúnen para disfrutar de sus desayunos.

Este éxito generacional se basa en varias claves. Estas son las principales.

Años de experiencia

Islantilla, en Huelva, fue el lugar que vio nacer a 100 Montaditos hace ya 22 años. En un local de tan solo 20 metros cuadrados, José María Fernández Capitán, creador del concepto, planteó una idea: ofrecer a un solo precio, en aquel momento 100 pesetas, cien montaditos con pan recién hecho y cerveza fría servida en jarra helada.

La inspiración vino, por supuesto, de su tierra. Así, el aspecto del local simulaba el aire de las tabernas gaditanas tradicionales; aún hoy, los cuadros en blanco y negro colgados en la pared de cada local invitan a disfrutar de un ambiente que recuerda al sur.

Hoy, Capitán sigue siendo el único propietario y presidente ejecutivo de Restalia Holding, firma tras 100 Montaditos y otras compañías como La Sureña y The Good Burger. Nacido en los 60, ha basado su éxito en trabajo constante; esto ha llevado a ser reconocido como uno de los empresarios más importantes e influyentes de España, según distintos organismos. 

Adaptarse a los tiempos

Aunque el concepto sigue siendo similar al de su raíz –ofrecer un producto smart cost que democratiza la gastronomía de calidad a un precio justo-, la firma ha avanzado en paralelo a sus clientes. Hoy, 100 Montaditos hace un guiño tanto a las nuevas generaciones como a otros modos de alimentación.

En su último cambio de carta, la marca ha ampliado la oferta de productos para ofrecer mayor variedad y otras alternativas culinarias, como la incorporación de aperitivos veganos y la introducción de sus empotraditos, panes rústicos rellenos con opciones dulces y un naming fresco y acorde al concepto de la firma. Además, también cuentan con nuevos ingredientes, como el kiko crushed que acompaña como topping a sus recetas clásicas.

La innovación no se queda solo en el terreno gastronómico: hace dos años, la firma se estrenó con éxito en el terreno delivery, en línea con las demandas actuales; y desde el año pasado, la innovación está presenta también en los pagos, que ya incluyen las criptomonedas como opción. 

Producto de primera

Por supuesto, el producto es la clave del éxito principal. Sus jarras heladas han conquistado a millones de consumidores, y sus opciones frías más allá de la cerveza, la clara con limón o el tinto de verano de grifo han hecho que sea un espacio para todos aquellos que buscasen refrescarse.

Pero los protagonistas son –y serán siempre- los montaditos. Buen producto inspirado en la gastronomía española y que se abastece, cada vez más, de productos nacionales. Hoy, el 86% de las materias primas proceden de proveedores dentro de nuestras fronteras, y uno de los objetivos de la firma a corto plazo es conseguir que este número suba al 100%.

Porque 100 Montaditos es algo muy nuestro. Sus empleados, sus sabores y sus sabores pertenecen ya al imaginario colectivo de un país que no sería lo mismo sin sabores como el pollo y alioli, la tortilla de patatas o la salsa BBQ.