Espinar ha detallado, en declaraciones a Europa Press Televisión, que el turismo "se va recuperando" y esta Semana Santa "el valenciano se ha movido más de un 40%, el internacional sobre un 35% y el resto, nacional".

Sin embargo, "el ticket medio ha sido relativamente bajo porque hay dos factores negativos: la inflación y los costes".

"Hay que tener en cuenta que la inflación esta afectando a las familias y la renta libre disponible que queda se va minimizando. El cliente se ha vuelto muy prudente debido a la situación económica y a esta espiral de inflación a la que no se ve salida", ha aseverado.

COSTES ENERGÉTICOS

También ha recalcado que "los costes energéticos se han duplicado y las materias primas hasta el 40% en algunos casos, por lo que ha mermado mucho la rentabilidad".

Por ello, Espinar ha asegurado que el sector mira al verano "con optimismo porque la gente quiere salir y disfrutar". "Con mayor o menor gasto la gente", ha recalcado, aunque ha admitido que existe también "preocupación" por cómo esta menor capacidad de gasto de las familias puede afectar al turismo.

Por otra parte, sobre el fin de las mascarillas en interiores, ha comentado que será un elemento más de libertad para los clientes total, aunque ha animado a seguir tomando precauciones.

"Al final, la sociedad tomará las medidas que crea pertinente; los dos años de pandemia nos han reeducado a todos en la prudencia porque no queremos volver al punto de salida".