"Creemos que es muy importante reflexionar, al menos una vez al año, sobre por qué estamos aquí, cómo hemos llegado hasta aquí, qué hemos aprendido de nuestra Transición y, sobre todo, defender algo que para nosotros es esencial como gobierno autonómico, como Consejería, que es el pilar de nuestra legitimidad, el pilar de nuestra libertad", ha aseverado Igea.

Es por ello que la Junta ha organizado este viernes, 3 de diciembre, la jornada 'Memoria de Nuestra Democracia', a fin de conmemorar, homenajear y reflexionar sobre la Carta Magna y cuya clausura ha corrido a cargo del vicepresidente y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior.

En ella, Igea ha defendido que la Constitución es fruto de un trabajo colectivo: "Un trabajo de mucha gente y es lo que nos asegura que no volveremos a enfrentar dos mitades del país. No hay dos legitimidades y quien cuestiona esto lo que está haciendo es una enmienda a la totalidad a nuestro sistema de convivencia, porque todo el mundo renunció a su legitimidad para construir una legitimidad en la que todos cabemos".

"Eso es la Transición; ese es el nacimiento de la Constitución, en la construcción de una legitimidad nueva, distinta, que no es heredera del franquismo, que no es heredera de la República", ha incidido.

Aunque no pudo votar entonces, pues tenía 14 años -"soy menos mayor de lo que algunos piensan y más de lo que a mí me gustaría"- ha recordado que como "el sexto de siete hermanos", vivió aquella etapa "con muchísima, muchísima intensidad".

"Y siempre me pregunté: ¿por qué se grita a la vez libertad, amnistía y estatuto de autonomía?' y ese grito explica muchas de las cosas que pasan hoy en nuestro país y por qué para muchas personas es igual de legítimo ser nacionalista que defender la democracia liberal. Porque ese grito de reivindicación autonómica estaba equiparado a la lucha por la libertad. Lo mismo que la petición de amnistía, que, curiosamente, efectivamente, fue una conquista de los partidos de izquierda", ha rememorado el vicepresidente, consciente de que "la memoria es un asunto importante y que no ha de tener lagunas".

Por último, ha reconocido que "la Constitución se puede reformar", pues "tiene su sistema y su manera de hacerse pero se tiene que hacer también de la ley a la ley: no existe una manera de cambiar la legitimidad si no es con un procedimiento legal".