Según ha valorado la presidenta balear, "esta comunidad respetará todos los acuerdos que se trasladen como normativa obligada para las comunidades autónomas" porque, ha añadido, "no queda otra". Así, ha apuntado, "se tramitarán las decisiones que se vuelvan norma por parte de las comunidades".

No obstante, ha precisado, "para poder posicionarse hace falta hablar bien con el Ministerio, saber cuáles son las condiciones en las que se plantea el acuerdo, y cuál es el acuerdo con la letra pequeña". "Será después", ha incidido, "cuando se podrá expresar la opinión del Govern con mucho más conocimiento de causa".

"En cualquier caso", ha querido dejar claro, "es el Gobierno de España el que deberá tomar la decisión". "Y, Baleares como todas las que toma el ejecutivo y que obligan a las comunidades deberá de acatarla", ha sentenciado.