Este órgano estará coordinado por José María Cabeza, Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales y Premio Nacional de la Edificación, y el resto de los miembros serán Manuel Losada Villasante, Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica; Manuel González, catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Sevilla y Gran Cruz de la Orden de Alfonso X; Antonio Almagro, Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales; Antonio Caballos Rufino, catedrático de Historia Antigua de la Universidad de Sevilla; y Román Fernández-Baca, alcaide del Alcázar de Sevilla y ex director general de Bellas Artes y del Instituto Andaluz de Patrimonio.

También formarán parte de este consejo asesor Juan Fernández Lacomba, pintor e historiador del Arte, miembro de la Academia de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría; Víctor Fernández Salinas, catedrático de Geografía Humana de la Universidad de Sevilla que también ha desempeñado la presidencia del Comité Internacional de Itinerarios Culturales de ICOMOS; Alfonso Jiménez, Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales; Pilar León, Catedrática de Arqueología de la Universidad de Sevilla y miembro de las academias de Historia, de las Buenas Letras y de Bellas Artes de Sevilla; Fernando Mendoza, Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales; Isidoro Moreno, catedrático de Antropología de la Universidad de Sevilla y Premio Andalucía de Investigación; y Juan José Negro, doctor en Biología y miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

El alcalde de Carmona ha agradecido a todos "su colaboración desinteresada para formar parte de este órgano que formarán un equipo de trabajo multidisciplinar y que será un apoyo principal y una referencia constante para nuestra candidatura".

Juan Ávila ha señalado que "para Carmona es un honor y un privilegio contar con estos colaboradores cuya experiencia y acreditada solvencia científica, técnica y profesional serán claves en el proyecto que hemos iniciado".

La candidatura de Carmona se centrará en su paisaje cultural, patrimonial y natural; resultado de las condiciones geográficas y de la dinámica histórica acontecida en el territorio y que confirman la presencia ininterrumpida de diferentes culturas desde el principio de la intervención humana hasta la actualidad.

Carmona tiene evidencias de ocupación humana desde inicios del periodo calcolítico, hace más de 5.000 años. Desde ese momento, la ciudad ha estado habitada por todas las culturas documentadas en el bajo valle del Guadalquivir, dando lugar a un valioso legado cultural que se conserva en su arquitectura y en una rica estratigrafía en el subsuelo.

Si bien Carmona podría presentar una propuesta centrada en su Conjunto Histórico o a algunos de sus principales monumentos como el Alcázar de la Puerta de Sevilla y sus murallas defensivas, el número y la tipología de los bienes españoles ya inscritos en las lista de Patrimonio Mundial aconsejan presentar la candidatura de Carmona enmarcada en su paisaje, tanto urbano como rural, ya que en el mismo se encuentra reflejada la riqueza patrimonial de la localidad así como la interacción producido a los largo de miles de años entre la ciudad y el territorio.