El consejero de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Jesús Julio Carnero, ha apuntado que la nueva Política Agrícola Común (PAC) ofrece a los estados miembro "muchísima autonomía" a la hora de "definir el conjunto de acciones y prioridades" y, en este proceso de negociación para el plan estratégico nacional, ha asegurado que la Administración autonómica está negociando "con uñas y dientes" los intereses de los agricultores y ganaderos de la Comunidad.

Sobre el nuevo periodo de la PAC, ha reconocido que "viene con menos dinero" pero que la acción de la Junta ha permitido, como ejemplo, que en el azúcar, como ayuda asociada, los profesionales de la región reciban "en torno a lo mismo que venían cobrando y por los mismos productos" a pesar de que en un principio en la negociación se planteaba el concepto de regresividad para explotaciones más grandes.

Asimismo, dentro de una negociación que se mantiene "abierta", el consejero Jesús Julio Carnero ha insistido en que desde la Junta se defiende que "se tenga en cuenta al agricultor y al ganadero profesional".

Por ello, ha abogado por "seguir luchando por el reconocimiento del agricultor profesional" en un proceso de negociación en el que "las fichas de este puzle, y el puzle se llama la agricultura y la ganadería de toda España, están lanzadas al aire" y ahora "tienen que encajar".

"Lo que tenemos que hacer es seguir trabajando para conseguir el máximo de los intereses que tienen que tener reconocidos el agricultor y el ganadero de Castilla y León", ha añadido en un encuentro con los medios de comunicación en Salamanca con motivo de su visita a una plantación de soja en Arabayona de Mógica.