El asfalto nos quema y el aire acondicionado nos congela. En plena ola de calor, las temperaturas que han de soportar los murcianos que caminan por la ciudad son de escándalo. De hecho, en apenas unos minutos una persona puede pasar de los 45 grados de temperatura en plena Ronda de Levante a los 25 de una conocida cafetería del centro. 20 grados centígrados de diferencia, como pudo comprobar 20 minutos el viernes.

Tal vez sean estos cambios bruscos de temperatura los que provocan que en España, durante el verano, se produzcan unos dos millones de resfriados «de los cuales el 50% se debe al mal uso del aire acondicionado», según el neumólogo Sergio Alcolea.

Y es que el calor también hace de las suyas, «de hecho, el aire acondicionado es incluso sano para los problemas de tensión. Es su mal uso el que causa problemas. No se puede prescindir de él en verano. La temperatura ideal está entre los 23 y los 25 grados», explica Cristina Martínez, coordinadora de Medio Ambiente de la Sociedad Española de Neumología.

Las quejas son frecuentes entre los usuarios de líneas de autobús como la 52, entre Murcia y Altorreal: «Vamos como los pollos desde que se han reducido los servicios», asegura María, una vecina de la urbanización. Para la Federación de Consumidores, reclamar por exceso o defecto de temperatura es difícil, ya que no hay una norma específica, como pasa con el ruido.