De los 39 mercados de alimentación municipales que atesora Barcelona, un patrimonio comercial y social de primer orden del que presume la capital catalana siempre que puede, siete de ellos están culminando su transformación integral. Se trata de mercados de abastos populares del total repartido por los 73 barrios barceloneses. Son los de Horta, Sant Andreu, L'Abaceria (Gràcia), Montserrat (Nou Barris), Sagrada Família (Eixample) y Besòs (Sant Martí) y Galvany (Sarrià-Sant Gervasi).
El Ajuntament dedica 70,6 millones de euros de los 96 millones que tiene previsto invertir en los mercados hasta 2023, a estas siete "grandes reformas" y rehabilitaciones, que en algunos casos suponen la demolición del edificio original y el uso de instalaciones provisionales, normalmente carpas. Es el caso del de L'Abaceria, que se ubica temporalmente en el Passeig de Sant Joan. Otros 2,7 millones irán destinados a la digitalización de estos equipamientos.
La trascendencia de esta red comercial municipal no es menor para la capital catalana, pues, además de albergar 2.143 establecimientos, solo durante el pasado año 2020 (teniendo en cuenta que estuvo en pandemia desde mediados del mes de marzo) estos recibieron más de 46 millones de clientes físicos y vieron multiplicados por 10 los encargos por teléfono y en línea. En años anteriores y prepandémicos, se llegaron a atraer a 67 millones de visitantes.
Asimismo, los mercados tradicionales son fundamentales puntos de conexión y dinamización de los ejes comerciales cercanos, que engloban el comercio de proximidad y local de cada distrito. Hay además 12, del total de 40 edificios, catalogados como monumentos artísticos. Detallamos en qué fase se encuentra cada uno de estos proyectos de mejora, sobre la base de la información facilitada por el consistorio barcelonés.
El Ajuntament dedica 70,6 millones de euros de los 96 millones que tiene previsto invertir en los mercados hasta 2023, a estas siete "grandes reformas" y rehabilitaciones, que en algunos casos suponen la demolición del edificio original y el uso de instalaciones provisionales
Mercat d'Horta
El mercado provisional de Horta será una edificación singular que, una vez deje de acoger temporalmente las paradas alimentarias, se mantendrá como una estructura permanente de la futura zona verde situada en la confluencia de las calles Porto y Lisboa. El edificio se construirá con madera y ocupará una superficie de 1.400 metros cuadrados. Tanto la edificación como la ubicación de los puestos de venta (32 de alimentación y cinco de otras tipologías), y la urbanización, costarán unos 2,2 millones de euros.
La previsión es que los trabajos de la estructura provisional acaben en el verano del año que viene, aunque de momento todavía está pendiente de redacción el proyecto básico y ejecutivo del proyecto.
El edificio original del mercado se rehabilitará y se reordenará la sala de ventas mediante pasillos más anchos, la mejora de los accesos y la introducción de nueva oferta comercial. Se conservará la actual estructura de hormigón, pero incorporando un cierre exterior de vidrio para que el esqueleto del equipamiento quede a la vista. Se prevé que en 2022 puedan comenzar a ejecutarse los trabajos, que durarán unos dos años (hasta 2024).
Mercat de L'Abaceria
El pasado mes de febrero trascendía que el proyecto inicial de reforma de este emblema comercial del barrio de Gràcia se modificaba para dar cabida a las demandas expresadas por entidades y asociaciones que reclaman su presencia en este espacio. Se decidió construir una tercera planta subterránea, de 3.500 metros cuadrados, en las que se ubicarán almacenes a su disposición. También ganará 1.120 metros cuadrados de zona pública de uso vecinal.
El mercado se trasladó a su emplazamiento actual en 1892 y se cubrió, llamándose entonces Santa Isabel. El pasado mes de enero acababa la deconstrucción del edificio, dejando a la vista la estructura metálica típica de los establecimientos de aquella época (finales del siglo XIX). Las obras podrían arrancar a finales de este año.
El mercado resultante definitivo, en lo que ahora mismo es un gran solar en la estrecha Travessera de Gràcia, tendrá 14.561 metros cuadrados. La carpa provisional del Passeig Sant Joan (entre las calles de Indústria y Sant Antoni Maria Claret) cuenta desde 2018 con 56 puestos, 43 de ellos de alimentos.
Mercat de Sant Andreu
Los trabajos del nuevo equipamiento alimentario se encuentran en su última fase, tanto en cubierta y fachada como en acabados interiores. Las obras de los establecimientos están en proceso de licitación y podrían comenzar en enero del año que viene.
En el edificio principal, ubicado en la plaza del Mercadal, se colocará el mercado de alimentación y un local con paradas de otras tipologías de productos, que hará la función de pasaje cubierto entre la plaza y la calle de Rubén Darío.
En el subterráneo del inmueble, de 2.458 metros cuadrados, estarán los espacios logísticos y de almacén. La planta baja se reservará a la actividad comercial. En el bloque anexo, de 650 metros cuadrados, y de dos plantas, se ubicarán las paradas no alimentarias y el local de la asociación de vendedores.
Mercat del Besòs
Ya ha finalizado la primera fase de remodelación de los accesos al área logística y a la cubierta del Mercat del Besòs, que hará las funciones de aparcamiento, para la que se ha tenido que cerrar comercialmente.
En la segunda fase, en la que se ha reactivado la actividad comercial, se derruye la antigua rampa de acceso para construir otra nueva en así como la nueva zona logística de la calle Cristòbal de Moura con la calle Perpinyà. La reforma finalizará en la primavera del año que viene.
Mercat de Montserrat
Actualmente se está acabando de redactar el proyecto ejecutivo de este nuevo mercado de Nou Barris, que tendrá que aprobarse antes de que se adjudiquen las obras y se inicie la edificación. El mercado, de nueva construcción en el solar actual de la calle de Aiguablava, junto a Via Favència, incluirá un autoservicio de 1.300 metros cuadrados, una zona subterránea de carga y descarga y un aparcamiento para vendedores y clientes. También se urbanizará el entorno del nuevo equipamiento.
Mercat Sagrada Família
En este mercado se quiere acometer una reordenación comercial de la zona de ventas que estará sujeta a la reforma del centro cívico que ocupa la misma manzana de la calle de Padilla. Este equipamiento se inauguró en 1993, pero sus orígenes se remontan al año 1944, y se encuentra en un proceso de declive de su actividad comercial que arroja un 67% de las paradas cerradas en los últimos cinco años, con solo 36 abiertas de las 200 que llegó a tener.
El Institut Municipal de Mercats de Barcelona (IMMB) destinó en 2020, año de la pandemia, una partida de medio millón de euros para una serie de mejoras ordinarias y de momento no hay un plan ejecutivo para la reordenación que se quiere acometer y que también actuará en otros ámbitos del barrio de la Sagrada Família.
Mercat de Galvany
El pasado mes de marzo se dio el primer paso en la mejora de este mercado de Sarrià-Sant Gervasi, consistente en la renovación de la red eléctrica por valor de 1,3 millones de euros. Los trabajos podrían quedar listos a finales de año y supondrán el aumento de la potencia de la red, que está obsoleta.
También se cambiará la iluminación y la megafonía del mercado. El Institut Municipal de Mercats está estudiando si la reforma que se lleve a cabo finalmente será parcial o integral y por eso, la prioridad antes de que acabe 2021, es desarrollar el plan director.
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