Los profesionales se marcan como objetivo que en el plazo máximo de tres años el colectivo pueda recuperar el poder adquisitivo que ha perdido a causa del encarecimiento de productos indispensables. En un documento consensuado, el sector aboga porque el Institut Metropolità del Taxi (IMET) distribuya en dos partes iguales de 12 horas cada una de las tarifas diurnas y nocturnas. Además, se reclama que los peajes de los túneles de Vallvidrera los asuman los clientes y que se apruebe una tarifa especial y diferenciada para los servicios realizados a través de radio-taxi. En cuanto a las prácticas «fraudulentas» de algunos profesionales, las entidades reclaman una actuación administrativa contundente e inmediata para terminar con las comisiones.