Así lo ha anunciado la portavoz del PP en Cort, Mercedes Celeste, que ha criticado al alcalde, José Hila, por su "prepotencia y equidistancia" ante el "descontento vecinal" respecto a la propuesta.

"Se ha negado a dialogar una solución que evite al máximo las expropiaciones", ha lamentado la portavoz 'popular', que también ha recordado el "no rotundo" del que el equipo de gobierno a la propuesta del PP para reponer los contenedores de basura eliminados en las zonas más alejadas del núcleo urbano de Establiments.

"Es una vergüenza que el alcalde de Palma dé un ultimátum a los vecinos de su ciudad y presuma de ello sin ningún rubor. Guardar los problemas en un cajón no es propio de un equipo de gobierno sino más bien de alguien que esconde la cabeza bajo el ala cuando vienen mal dadas", ha censurado Celeste.

La regidora ha remarcado que "el liderazgo no es imposición sino la capacidad de trabajar codo con codo, coordinar equipo y trabajar por el bien de la comunidad", y ha mostrado preocupación por "la falta de talante del equipo de gobierno municipal, que ya ha recibido el suspenso de la Defensora de la Ciudadanía".

"Lo estamos viendo con el proyecto de reurbanización de Nuredduna, en el que se oponen a todo y a todos con tal de no ceder en su postura y desarrollar un proyecto que sea un eje vertebrador de todo el barrio de Pere Garau y que suponga la revitalización de todo el tejido social, económico y laboral del barrio más poblado de Palma", ha añadido Celeste.

Por todo ello, el PP ha acusado a Hila de sembrar Palma de "cadáveres urbanos, como el mercado municipal de Camp Redó, las galerías de la Plaza Mayor, el litoral de Ponent, el solar de la antigua prisión, Son Busquets y proyectos eternos como el bosque del canódromo o la piscina de s'Aigo Dolça".