Los vecinos de San José de la Montaña se sienten conformes con las infraestructuras que tienen. Asumen que sólo cuenten con un bar como epicentro de sus reuniones y que dependan para casi todo de la pedanía de El Palmar. Eso sí, se quejan del mal estado de las baldosas del parque. «"Es peligroso. Se puede caer algún crío jugando", explica Josefa Peñalver.

No es lo único. "Tenemos la misma carretera para entrar y salir de San José de la Montaña. Es peligroso por la velocidad de los vehículos. Deberían de poner resaltos", denuncia Ángeles Noguera.

El alcalde pedáneo, Diego López (PP) asegura que "para que se pudiera hacer otra salida los vecinos tendrían que ceder terrenos". En cualquier caso, su prioridad es la construcción de una nueva calle en la población.

Por su parte, Tomás González (PSOE) apunta que "hacen falta servicios. San José de la Montaña está en un estado de abandono y el centro cultural no se utiliza".

Nuevos vecinos

El desarrollo del ladrillo también tuvo su incidencia en la localidad y muchos vecinos nuevos llegaron para hacerse chalets.

"Se van a comer la montaña. Cuando acabe la crisis empezarán a construir urbanizaciones. Encima han colocado unas líneas de alta tensión que afean el paisaje", dice un jubilado, José V. N.

"No hay señalización para llegar al pueblo. Ni hay un ceda el paso, ni un paso de peatones. Parece que no existimos", asegura por su parte Antonio García.

En cambio, la camarera inmigrante del único bar de la localidad dice que "llegué hace tres años y a mí me acogieron muy bien. Es un lugar agradable para vivir. Me siento como en casa".

Un rayo pasa cada hora

La población, de 3.726 habitantes, no cuenta con ningún  servicio educativo ni sanitario. Dependen de la pedanía de El Palmar que se encuentra a 2 kilómetros. Sin embargo, tienen buena comunicación ya que el Rayo 18 comunica cada hora la población con el hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia y con la pedanía de El Palmar. Eso sí, se quejan de que tienen un centro cultural infrautilizado.