Artemi Rallo ha participado en unas jornadas celebradas en Murcia sobre la protección de datos, dentro del marco de la feria Sicarm.

¿Estamos desprotegidos?

Lo que ocurre es que los usuarios de Internet estamos usando muchos servicios que se sustentan a base de dar abundantes datos y no siempre somos conscientes de ello e ignoramos cómo minimizar esta información. Además, es difícil revertirlo y los efectos son difíciles de prever.

¿Son peligrosas las redes sociales (Facebook, Tuenti, MySpace...)?

Cuando una persona crea un perfil en estos sitios no sabe que la Red ofrece la posibilidad de dar menos información. Si no se modifican esos parámetros, nuestros datos se pueden estar compartiendo con millones de usuarios. El problema es que a veces no está claro de quién es lo que un usuario cuelga, quién es el propietario. Si las empresas se apropian de esos datos, en teoría pueden hacer lo que quieran con ellos.

¿Y qué se puede hacer?

Lo que hay que hacer es que los que proveen los servicios pongan mecanismos para evitar la difusión de los datos. Los consejos que se pueden dar, por ejemplo a los padres, es que acompañen a sus hijos en el proceso de aprendizaje de las herramientas informáticas.

¿Qué se debe evitar?

Hay que evitar subir fotos familiares, dar datos como la dirección, el lugar de trabajo o el centro escolar o creencias religiosas. Hay que ser precavidos.