A este respecto y en un comjunicado, Al-Zahara ha recordado que los centros cívicos están concebidos como "los equipamientos de proximidad por excelencia del Ayuntamiento, que vertebraran y desarrollaran el modelo de organización territorializada. En sus espacios se debía realizar la prestación integrada de servicios y habilitar los cauces de participación ciudadana, y se constituyeron como espacios polivalentes e integradores de encuentro desde los que se ofertaban recursos y se fomentaba la convivencia en valores sociales".

Sin embargo, "estos preceptos para una red forjada con tanto esfuerzo a lo largo de tres décadas han quedado en papel mojado, y en estos momentos la situación de estos espacios integradores de la convivencia social están bajo mínimos", pues hay centros cívicos "sin responsable de la dirección, sin actividades, sin personal técnico de participación, y con bibliotecas casi sin funcionamiento, servicios sociales actuando bajo mínimos, servicio de atención a la ciudadanía deficitario y ludotecas cerradas".

La directiva de Al-Zahara ha reconocido que "este deterioro ha sido progresivo a lo largo de los últimos gobiernos municipales, y en este último mandato, a la tan sabida y manida explicación dada por todos los gobiernos municipales de la falta de personal y recursos, se han unido los problemas del covid-19", que han "dado la puntilla a las funciones de estos edificios y a los contenidos y actividades que albergaban".