Así lo ha informado la Guardia Civil de Valladolid en un comunicado recogido por Europa Press en el que detalla la denominada 'Operación OCTOPA', en la que se ha detenido a cuatro personas y se ha procedido la investigación de otras dos, todos ellos vecinos de Valladolid, relacionados con el robo con violencia e intimidación cometido en un domicilio de la localidad de Quintanilla de Onésimo.

La Guardia Civil inició la investigación el pasado mes de febrero, cuando varios vecinos alertaron a Emergencias Castilla y León 112 de que una mujer de 87 años pedía auxilio desde su domicilio.

La víctima relató que tres individuos encapuchados habían accedido a su domicilio por la parte trasera del inmueble, que en un primer momento la amenazaron con una navaja en el cuello, y la obligaron a la apertura de la caja fuerte. Posteriormente la ataron las piernas, y la dejaron así tras su huida, por lo que tuvo que ser finalmente atendida por una dotación sanitaria por "su gran estado de nerviosismo y lesiones leves que sufrió a consecuencia del robo".

Los autores se apoderaron de una elevada suma de dinero, numerosas joyas de gran valor y otra documentación incluida la bancaria.

La Unidad Orgánica de Policía Judicial se hizo cargo de la investigación y en un primer momento se centraron en sospechosos residentes en la propia localidad, para días después dirigir las pesquisas hacia un grupo de delincuentes habituales y conocidos de Valladolid capital.

Fruto de esas investigaciones se logró comprobar que una persona del entorno de uno los integrantes de la banda había realizado una venta de joyas en un establecimiento de 'Compro Oro' en la capital. Una vez recuperadas las piezas vendidas, la víctima reconoció las joyas como parte de las sustraídas en el robo, por lo que se procedió a la investigación de dos personas por un presunto delito de receptación.

La Guardia Civil, una vez centrado el paradero de los integrantes de la banda, recibió autorización del Juzgado para entradas y registros en dos domicilios del Barrio de Las Delicias, donde los agentes lograron recuperar buena parte de las joyas sustraídas, armas de fuego, documentación bancaria a nombre de la víctima y casi medio kilo de sustancias estupefacientes, en dichos registros se practican las dos primeras detenciones.

Posteriormente, y tras un dispositivo policial en un barrio de Valladolid, se logró la detención de otros dos sospechosos, hermanos y presuntamente implicados en el robo y que se habían dado a la fuga en un primer momento.

Entre los efectos recuperados en uno de los registros domiciliarios, se han detectado efectos que procederían de otros robos de la provincia y se incautaron joyas que no pertenecían al robo de Quintanilla de Onésimo, por lo que la operación aún no se da por finalizada y los esfuerzos se centran en lograr pruebas que apuntalen la autoría de los detenidos y el esclarecimiento de otros robos.

Por ello, la Guardia Civil solicita la colaboración de aquellos ciudadanos que hayan podido ser víctimas de robos en domicilios para que puedan reconocer los efectos sustraídos, ubicados en la Comandancia de la Guardia Civil de Valladolid.

A los implicados se les atribuyen los delitos de robo con fuerza e intimidación, detención ilegal, tenencia ilícita de armas, contra la salud pública, receptación y amenazas con armas de fuego. Han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, quien decretó el ingreso en prisión de uno de ellos y la libertad provisional con medidas cautelares del resto de los detenidos.

La operación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.