Nada de alcohol fuera del botellódromo, que estará abierto, ni a menores de edad. Son las dos máximas con las que trabajarán los agentes de la Policía Local en el puente de mayo y, especialmente, durante el Día de la Cruz.

El Ayuntamiento ha organizado un dispositivo de seguridad para estos tres días de fiesta con 400 agentes de la Policía Local, en colaboración con el Cuerpo Nacional de la Policía y la Guardia Civil.

Los agentes se centrarán en controlar los lugares más concurridos como Plaza de Toros, Triunfo, Albaicín, Pedro Antonio de Alarcón y los alrededores de la Plaza del Carmen, donde no se descartan los cortes de tráfico si se producen colapsos.

El punto fuerte de vigilancia se establecerá el día 3 para evitar la venta de alcohol a menores y su consumo fuera del botellódromo, que finalmente permanecerá abierto todo el fin de semana. Parte del dispositivo se ocupará en controlar la venta de bebidas alcohólicas tanto en establecimientos como de forma ambulante.

Habrá técnicos de Medio Ambiente para certificar que se cumple la normativa de no vender fuera del horario establecido, ni a menores (Granada es una de las ciudades españolas donde es más fácil para los adolescentes obtener alcohol, según un estudio).

Los agentes intensificarán los controles de alcoholemia y se vigilará el tráfico en la Circunvalación y en la rotonda de Méndez Núñez. Y se repartirán 3.000 unidades de pruebas de alcohol desechables.

El dispositivo especial del puente de mayo también incluye la vigilancia de las manifestaciones que se desarrollarán el Día del Trabajo, que supondrá un coste de 35.000 euros para la Concejalía de Protección Ciudadana, unos 60.000 euros menos que el año pasado.

Este ahorro se explica porque el año pasado el personal trabajó en servicio extraordinario y este año la mayoría lo hará en servicio ordinario.

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