Los barrios de la Magdalena y Los Pajaritos recuperarán en pocos meses el esplendor de hace 30 años, cuando aún presentaban una imagen rejuvenecida.

El estado de las calzadas y aceras de ambas zonas -una comercial y la otra principalmente administrativa- han sufrido el paso del tiempo en forma de estrecheces, baches y precaria iluminación; un estado que no perdurará por mucho más tiempo. La semana que viene arrancan las obras de la remodelación integral de ambos barrios, actuación que se financiará con cargo a los fondos estatales y del plan andaluz Proteja, explica la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto.

En el caso de la Magdalena, las obras se ejecutarán por fases «para no perjudicar a los negocios, tal y cómo hemos consensuado con los comerciantes», añade la edil.

Los peones entrarán primero en Santa Teresa y La Paz, entre otras, para seguir en septiembre por Párraga, Buensuceso y Magdalena.

En las calles más comerciales, como Puentezuelas- será peatonal- o Gracia -con rodadas de asfalto-, «no intervendrán hasta el uno de julio» y terminarán con el verano.

Todas tendrán la misma imagen que Alhóndiga, con pavimento de granito y sin aceras. En siete meses habrá acabado la actuación.

En Los Pajaritos se acometerá la misma remodelación de la calle Cisne en Mirlo, Tórtola y Faisán -fuera del proyecto quedan las transversales y Halcón-. Las vías pasarán a tener aceras más anchas, nuevas farolas y árboles, apunta Nieto. Las obras durarán cuatro meses a contar desde el martes que viene.

Afecta a terrazas y aparcamientos

Pese a que los vecinos llevan años demandando las actuaciones, éstas vienen con letra pequeña. En Magdalena preocupa que cualquier retraso afecte a los comercios y en Pajaritos la pérdida de aparcamientos, pues los coches deberán estacionar en línea en lugar de en batería.

Además, el inicio de las obras en este último barrio coincide con la temporada de terrazas -en las aceras-, de ahí que algunos hosteleros estudien no ponerlas este año.