La medida, que será debatida en el pleno del próximo jueves, se enmarca dentro de la reestructuración del gabinete acometida por el regidor y "como respuesta a las exigencias del difícil momento que atraviesa el municipio debido a la crisis económica que arrastra desde hace una década, que se ha visto agravada, en el último año, por la pandemia del coronavirus".

Así lo ha puesto de relieve en una comparecencia acompañada por la teniente de alcalde del PP Ángeles Isac. La disminución de salarios, según ha informado el Consistorio, irá en función de las remuneraciones que percibe cada edil, pero estará en torno al 20 por ciento, lo que supone un "importante descenso" en relación con lo estipulado en el pleno de organización del Consistorio celebrado en julio de 2019.

Los fondos que se quedarán en las arcas municipales procedente de esta iniciativa se invertirán en reforzar el empleo público a través de diferentes convocatorias de la Administración local y en la contratación de profesionales esenciales para el mantenimiento y mejora de los servicios públicos de la ciudad, como jardineros, peones o electricistas, entre otras categorías.

"Es un compromiso de este equipo de Gobierno y confiamos en que sea respaldado por el resto de la Corporación en la próxima sesión plenaria, puesto que entendemos que la situación actual requiere de un esfuerzo extra de todos", ha subrayado el regidor.

En su caso, por ejemplo, dejará de percibir 5.000 euros anuales, por lo que tendrá el salario más bajo de un alcalde del Ayuntamiento de Linares desde hace una década. De este modo, sus retribuciones estarán muy por debajo a las que recibía en su anterior puesto de trabajo, porque "así lo pide la ciudadanía", ya que, por encima de cualquier interés particular o político, está Linares.

La propuesta sobre los sueldos forma parte de la remodelación del equipo de gobierno anunciada por Caro-Accino el 27 de enero y que también se verá en el pleno del jueves. Esa modificación dio lugar a la salida de CILU-Linares del ejecutivo municipal al entender que no había sido consensuada ni negociada e implicaba una ruptura de facto del acuerdo que firmado en junio de 2019 junto a Cs y PP.

En las elecciones municipales de 2019, el PSOE ganó con ocho concejales, frente a los cinco que consiguió el PP, otros cinco Ciudadanos y tres CILU-Linares, mientras que Linares Primero logró dos ediles y otros tantos IU. Sin embargo, el PSOE no accedió a la Alcaldía por el pacto entre Cs, PP y CILU-Linares, ahora roto con el paso a la oposición de este último partido, cuyos representantes dejan también de percibir retribución como concejales delegados.

Por tanto, los concejales de la formación naranja y los del Partido Popular sustentarán a partir de ahora el equipo de gobierno en minoría, con diez de los 25 ediles que forman la Corporación linarense.