Los agentes, tras inspeccionar el turismo en el que viajaban, procedieron a la detención de los ocupantes por un presunto delito contra la salud pública. Y es que, la mera posesión de drogas por sí sola no es constitutiva de delito siempre que no se destine al tráfico ilegal de estupefacientes.

Pero si la cantidad de droga aprehendida es de cierta importancia o se está traficando con ella o favoreciendo su consumo por terceras personas, constituye un delito contra la salud pública, castigado por el Código Penal con pena de prisión y multa (art. 368 y siguientes Código Penal).