Tim Kretschmer, el autor de la matanza en un colegio de Winnenden, Alemania, que dejó como saldo 17 muertos, era un joven relativamente normal, según sus compañeros.

Su única característica extraña era su afición por las armas y el conocimiento que tenía de las mismas.

Otra de sus aficiones era el tenis de mesa, al que solía jugar con compañeros de la escuela, según se puede ver en un vídeo difundido por Internet.

Las imágenes aportan pistas sobre el perfil del joven, distorsionado por informaciones erróneas difundidas por la misma Policía alemana.

Este jueves, las autoridades anunciaron a la prensa que se habían encontrado mensajes de  Kretschmer en un chat en el que anunciaba sus intenciones de "provocar una carnicería". Horas más tarde tuvieron que rectificar, admitiendo que le habían atribuido por error el mensaje al joven.

Los investigadores también han encontrado en la red varias amenazas de nuevas matanzas en otro colegio en Heilbronn, que ha sido cerrado por la Policía de manera preventiva.