Se dotará a las imágenes de una mayor seguridad y se construirá un columbario en la planta baja para depositar las cenizas de los hermanos fallecidos. En noviembre, las obras obligarán a trasladar al Cachorro a la antigua capilla del Patrocinio, aledaña al templo.

Pese a la duración de las reformas, en la Junta de Gobierno aseguran que éstas no impedirán que sus pasos salgan de la actual sede el próximo Viernes Santo: «Aunque ha habido retraso, no habrá problemas», dice el primer secretario, Pepe Recuero.

Algunas novedades

Cristo y Dolorosa irán alojados en sendos camarines con temperatura especial. Y Luis Álvarez Duarte está diseñando ya el nuevo retablo para el altar del ábside del Cristo, que será circular.

Cultos y Quinario, en Santa Ana

El mayordomo de la Hermandad, José A. Fernández, calcula que a mediados de noviembre las obras llegarán a la iglesia y habrá que cerrarla al público: «El triduo será aquí hasta el 12 de noviembre, pero después trasladamos a Santa Ana los cultos y el quinario, que se adelanta al 14 de febrero». Las visitas al Cristo en la antigua capilla serán de 10.30 a 13.30 y 18.00 a 21.30 horas.

Un eficaz sistema contra incendios

Será la segunda Hermandad, tras La Macarena, que proteja sus imágenes con un telón cortafuegos (la corporación ya sufrió un importante incendio en 1973). Esta medida podría también adoptarse en el Gran Poder. El telón bajaría automáticamente en caso de fuego o terremoto y convertiría el ábside en una cámara acorazada.