Con un vestuario ambientado en los años 70 llegó Camo a First dates este martes, que en su presentación afirmó que "como homosexual me considero queer, pero una persona heterosexual también puede serlo".
"Look total, tú eres artista seguro: ¿A qué te dedicas?", le preguntó Carlos Sobera al recibirle en la entrada del restaurante de Cuatro, a lo que el colombiano le contestó afirmativamente.
El comensal explicó que "ser queer no es ser gay, es una teoría que se ha generado con los años que explica el hecho de personas que se sienten totalmente disidentes respecto al actual sistema heteropatriarcal".
Su cita fue Camilo, que admitió que "soy un tío un poco vergonzoso, pero me gusta ser simpático con la gente. Me gustan los animales, soy pacifista, vegetariano y también un poco payaso".
Al verle, Camo reconoció que "me gusta el rollo que tiene, podría salir con él", y Sobera les acompañó a la mesa para que comenzara la velada y se fueran conociendo un poco más.
Pero Camilo encontró la primera traba en su relación con Camo ya que "no me dejaba hablar. Le preguntaba una cosa y él se enrollaba un montón. Hablaba muy rápido y yo solo le escuchaba".
También comentaron sus gustos, donde Camo destacó que "lo que más me fijo en los chicos es que sean delgados", mientras que Camilo señaló que "me encantan los perroflautas. Los hippies, los punkis y los borrokillas de Navarra".
Al final, Camo sí que quiso tener una segunda cita con Camilo "para quedar más y conocernos", pero el barcelonés, por su parte descartó volver a ver al colombiano: "No he sentido feeling contigo".
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