Son actores, guionistas, directores... quieren que Sevilla no tenga nada que envidiarle a Barcelona y Madrid en cuanto a musicales.

Quieren que, igual que en Broadway, haya también aquí una cantera de profesionales del musical. Por eso, una treintena de chavales han creado la Asociación de Teatro Musical de Sevilla (ATMS) con la que quieren reivindicar la presencia de este género en la provincia.

«Nuestra intención es que se potencie el teatro musical porque hay poca tradición. Queremos preparar, crear y difundir nuestros propios musicales, y más adelante, organizar algún tipo de certamen», cuenta Verónica Espiga, una de las actrices.

El germen, fue un pequeño grupo de teatro que montó el musical Chicago en 2005. Hoy, ya son casi 30 y tienen donde ensayar: el Cuarteto Maravillas les ha dejado su nave, en la Plaza del Pelícano.

Ahí están preparando su próximo estreno, el musical Las plagas de Egipto, con música y textos propios. Lo estrenarán el 30 de mayo. Antes de eso, cerrarán la gira de su segundo montaje, Mucho ruido y pocas nueces, que podrá verse el 3 de abril en la Politécnica.

Buscan financiación para crecer

«No somos un grupo cerrado. Queremos seguir creciendo y buscando talentos». Y también algún tipo de apoyo o financiación por parte de las administraciones para poder seguir y crecer».

Se puede contactar con ellos en el 660 305 644, en info@teatromusicalsevilla.orgy en la web www.teatromusicalsevilla.org.

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