Testigos presenciales vieron cómo los dos aviones Mirage F-1 accidentados ayer en la provincia de Albacete , y que ocasionaron la muerte de tres pilotos, colisionaron en el aire, según dijo Juan Gil, alcalde de El Bonillo, que se desplazó al lugar de los hechos.

Según Gil, los trabajadores de la planta solar fotovoltaica que se está construyendo en la finca El Guijoso, donde cayó uno de los F-1 y que es propiedad de un conocido empresario albacetense, vieron cómo los dos cazas chocaron en el aire, tras lo cual se produjo una fuerte explosión y una gran columna de humo.

Los restos de los aviones Mirage F-1, que se accidentaron entre los términos municipales de El Bonillo y Ossa de Montiel, quedaron esparcidos en un "amplísimo radio" y cada uno de ellos fue a parar a fincas diferentes, situadas a casi tres kilómetros de distancia.

Los dos aviones, dos cazabombarderos de la clase Mirage F-1, estaban realizando vuelos rutinarios de entrenamiento cuando se estrellaron por causas que Defensa está investigando.

El recuerdo de la ministra

La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha recordado hoy a los tres pilotos fallecidos ayer y ha elogiado la "encomiable" labor que realizan los militares. Chacón se ha expresado en estos términos al comienzo del pleno extraordinario que celebra el Congreso.

Los funerales, en Albacete

Los funerales por los tres militares fallecidos, el capitán Jerónimo José Carbonell Rodríguez, de 29 años, natural de Murcia; el capitán Fernando Negrete Usón, de 33 años, natural de Zaragoza; y el teniente Roberto Carlos Alvarez Cubillas, de 29 años y natural de León, se celebra esta mañana en la base aérea de Los Llanos (Albacete).

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